TWOYG: Cap 10.

Capítulo 10: Escándalos. 

Y no importa cuanto haya sido herido;
Y en que se convierta la cosa que me hiere…
no puedo parar por nadie.

Está bien si solo encuentro un poco de luz
incluso si hoy el sol no sale,
“la incesante lluvia parará algún día, ¿no?..”

Dears-Gackt

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—Yunho ah, en esta ocasión la fiesta se siente diferente, es más alegre—Dijo Boa curioseando por entre los invitados con discreción.

—Debe ser por Minho, él muchacho que estaba con mis padres hace un rato.

—oh, tú madre le tiene cierta antipatía ¿No?—Yunho se llevó una mano al cabello y rio avergonzado.

—Es que acaba de notarlo, no tiene ninguna queja suya en cuanto al trabajo, solo que tiene esta cosa de espantarnos a las personas que considera poco beneficiosas para nosotros.

— ¿Y por qué le presento a Taemin a tú hermano? Es más, ¿Por qué quiere casarte con Tiffany?—

—Porque tiene dinero y porque tú ya estas casada mi querida amiga.

—Tonto—Dijo riéndose con dulzura.

—Vamos, es la verdad. Pero acompáñame, el menú te va a encantar—Dijo llevándosela directamente a la mesa de la comida.

— ¿Hablas en serio? ¿Qué ha pasado con las galletas que siempre metías de contrabando?

—Ya no son necesarias, el nuevo chef es inestable, pero me encanta su comida, por favor no le digas que yo dije eso. — Murmuro Yunho entregándole un pastelillo de arándanos, dios considero su almuerzo habitual en el menú, eso era tan Jaejoong, que solo rio mientras Boa se comía de un mordisco el panecillo.

—Increíble, eso está delicioso. ¿Cómo se llama el chef?

—Kim Jaejoong, mira es él—Dijo señalando el enorme espectacular en el edificio de enfrente.

— ¿Es broma?—Dijo señalando la imagen incrédula—Estoy segura que la cara de “Boo” le pertenece a una linda señorita.

— ¡No bromeo!—Exclamo Yunho riendo—Lo conocerás en un rato, y podemos escaparnos mientras nadie mire e ir a las cocinas a probar el resto del menú antes que todo el mundo aquí.

—Eso mi querido amigo es una gran idea—Dijo Boa siendo interrumpida por los aplausos de los invitados cuando Yoochun ingreso al salón, él era la imagen de la empresa, siempre lo había sido y su personalidad era difícil de opacar, su papel era atraer las miradas no importando si la acción fuese buena o mala o quizás solo llegaba un punto en el que dejaba de importar. Caminar acompañado por un muchacho atractivo era una nueva forma de hacer las cosas, sin duda alguna.

—Creo que debemos acercarnos, es hora del discurso de padre—Susurro Yunho guiando a Boa entre la multitud mientras su padre y su madre se colocaban con Changmin cerca de Yoochun, dejando un espacio para él y Boa. Lucían como toda una familia sacada de cuento de hadas, salvo por Junsu, lucía como si quisiera estar en un lugar más bonito, ¿Pero quién no?

Yunho rio y agradeció a su familia y todos los invitados en esa fiesta de aniversario, alguien hizo algunas cuantas preguntas más y después su padre dio inició a la reunión mientras iluminaban la mesa de una esquina que hasta entonces todos ahí habían ignorado. Una réplica exacta del edificio principal con una figurilla curiosamente idéntica a su padre, eran el pastel de celebración y rápidamente se volvió el centro de atención, dándoles el tiempo suficiente para poder dispersarse como momentos atrás.

— ¡Ouch!—

— ¿Estas bien Boa? Disculpe señor—Dijo Yunho al tipo con el que había chocado su amiga, quien lo miro con irritación pero asintió en silencio.

— ¿Se encuentra bien señorita? —Dijo un hombre más bajo saliendo detrás del otro, si alguien le preguntase a Yunho, diría que bastante espeluznante.

—Señora, y claro, gracias—Dijo con seriedad Boa apartándose con Yunho rápido de ahí.

— ¿Qué fue eso noona?

— ¡Yunho!—Reprendió jocosa—Tenemos la misma edad,  y no es nada, es solo que ese tipo, Kookh Kim Hyon, es solo un mafioso disfrazado  de empresario. No entiendo por qué lo han invitado.

—La verdad no tengo idea de quién es, pero supongo que todo es acerca de las “relaciones” no te preocupes, voy a preguntarle a Kibum en cuanto lo vea, acompáñame.

***

—Quita esa cara de amargado hijo tienes que recibir a los invitados—Farfullo Bae So hacia Changmin mientras Minho caminaba junto a ellos inspeccionando el lugar, todo se veía increíble y se sintió un poquito orgulloso de sí mismo.

—Padre, en serio… —Gimoteo Changmin colocando su mejor sonrisa al ver a Lee Soo Man caminando directamente hacia ellos, dios y venía con su sobrina.

—Buenas noches caballeros. —

—Sunny, que adorable sorpresa muchacha. ¡Lee! ¡Cuánto tiempo sin verte!

—Señor Park, es un placer también, de alguna manera siempre se las arregla para escaquearse de las reuniones que tenemos Tyffany y Krystal con su esposa—El señor Park rio culpable y carismático y estrecho con fuerza la mano de Lee.

—Lo mismo digo Park, ha sido un tiempo, pero te sienta bien estar lejos de los negocios. Changmin, buenas noches.

—Buenas noches Soo Man shii, Soon Kyu—Dijo haciendo una reverencia suave y elegante además de breve.

— ¿Dónde está Hankyung? ¿Lo has despedido?—Cuestiono Lee sonriendo ligeramente recibiendo una sonrisa cordial y feroz por Bae So.

—No debe tardar en llegar, le di unas merecidas vacaciones y me conseguí un reemplazo maravilloso, te presento a Kim Minho—Dijo haciéndole un gesto para que se acercara.

—Buenas noches, espero que su estancia este resultando agradable, es un placer verlos de nuevo— Dijo Minho haciendo una respetuosa reverencia.

—Buenas noches Minho shii. Donghae no me había dicho que trabajabas en Corporaciones Park—Dijo el hombre para incomoda y decepcionante sorpresa tanto de Bae So como de Changmin.

—Aún debe estar molesto porque rechace el puesto de CEO que me ofrecía para su disquera—Gimoteo Minho avergonzado, sin querer ver a los ojos a ninguno de sus jefes.

— ¿Solo CEO?—Exclamo Sunny visiblemente decepcionada— Es tonto, que bueno que le dijiste que no.

—Vaya, es obvio que ya se conocían pero puedo preguntar ¿De dónde?—Se hizo notar Changmin bastante intrigado por lo que estaba escuchando. ¿Acaso había algo que no fuese imposible para don perfecto?

—Mi sobrino Donghae era su sunbae en la universidad y en más de una ocasión nos visitó y paso las vacaciones con nosotros en China, sigo preguntándome ¿por qué no te ha hecho revelar escabrosos secretos sobre esta familia?—Dijo con dobles intenciones haciendo que Minho sonriera más ampliamente.

—Porque le habría roto la nariz si lo insinuaba, probablemente esa es la razón por la que continua ofendido—Murmuro sonriendo cuando el señor Park palmeo su hombro con fuerza.

—Te dije que me había conseguido un asistente maravilloso Lee, y además leal.

—Por su puesto Park, no pudiste conseguir mejor muchacho, pero espero que explotes todos sus talentos ocultos y no lo dejes encargarse nada más de tus caprichos seniles—Bae So rio estruendoso  y negó para sí.

—Pero si tú eres mayor que yo Lee, en serio que eres muy pesado—

—Solo digo la verdad, y Minho acaban de llegar personas que quizás quieras saludar—Minho le dedico una mirada curiosa y volteo en dirección a la entrada principal del recinto.

—No puede ser… ¿Es Kyu hyun? —

—En carne y hueso Minho—Dijo Sunny confiada mientras Kim empezaba a lucir demasiado encantador a ojos  de cualquiera que tuviera dos dedos de frente. Bae So Park empezó a inquietarse, porque si Minho ya estaba enamorado, sus planes se irían al traste y no quería, por supuesto que no.

—Lo lamento, discúlpenme—Dijo avanzando nervioso entre la multitud dejando plantados a cuatro millonarios como si se tratase de cualquier cosa.

 — ¿Le presentaste a Cho Kyu hyun?—Cuestiono Bae So con intriga a Lee Soo Man.

—A él a Choi Siwon y a Kim Heechul aunque los dos últimos no vendrán, a Sungmin y Hyuk Jae los conoció por su hermano, Junsu. Esa familia tiene un especial encanto para atraer personas poderosas, Jaejoong su hermano mayor salió por un tiempo con Kim Hyun Joong, ¿quién dices que era Sunny?

—El vocalista de SS501—Dijo ella con voz cansina como quien ha dicho lo mismo un millón de veces y lo obligan a repetirlo hasta el cansancio.

—Sí, bueno ese.

 —Ah… Changmin—

— ¿Si padre?—Pregunto sintiéndose fastidiado por todo lo que acababa de descubrir, eso era tan molesto.

— ¿Por qué no has ido a recibir a los invitados con Minho? ¿Te crees que la educación no importa o qué?

—Lo siento, con permiso—Dijo mirando a su papá extrañado caminando apresurado tras Kim, porque parecía que ese día todo el mundo estaba drogado.

—Un billón de won y tú corriendo desnudo por toda tu empresa a que Kyu hyun  se gana a Minho antes que el torpe de tu hijo—

—Cállate Lee, ¿Cómo puedes ser tan insensible? Estamos hablando de la felicidad de mi hijo—Soo Man arqueo una ceja y Park sonrió como estrella de cine, odiaba cuando hacía eso.

—Que sean 2 billones y esa preciosa casa que tienes en Cancún. ¿Trato?

 —Trato. —Dijeron al unísono estrechando sus manos. Sunny se golpeó la frente abrumada y se fue a un rincón a comer pastelillos, no podía creer que fuesen tan inmaduros, pero tampoco iba a negar que ese jueguecito resultaría entretenido, Kyu ya había intentado mucho antes acercarse a Minho de ese modo y aunque no conocía tan bien a Changmin sabía reconocer los indicios de la atracción, si tenía que darle una calificación del 1 al 10 en intensidad al modo en que observaba a Kim, definitivamente le daba 20.

***

— ¿Estás seguro de que iba a estar aquí?

—Que sí Kyu hyun ¿Qué iba a ganar yo mintiéndote?—Exclamo Donghae con desespero abriendo los brazos emocionado al divisar a Kibum esperando por ellos en la entrada.

—Donghae…—Susurro abrazándolo fuertemente para después besarlo cariñoso—Te extrañe…—

—También yo Kibum, ¿Cómo has estado?

—Bien, pero me tienes abandonado.

—Lo siento.

—Pues yo lo siento más por tener que verlos en medio de una regresión—Farfullo Kyu hyun molesto volteándose para otro lado en busca de Minho, sin esperar toparse con un muchacho agradable a la vista, menudo y llamativo, pero que parecía algo perdido igual que la camisa rosada que usaba debajo de su traje.

— ¡Kyu hyun hyung!—Lo llamo esa voz que reconocería en cualquier sitio, volteándose justo a tiempo para corresponder el efusivo abrazo de su donsaeng.

— ¡Minho por dios!—Dijo apartándose un poco para observarlo mejor, llevándose una grata sorpresa— Estás- wow… Exuberante—Exclamo sonriente dándole un nuevo abrazo, apartándose al escuchar un intencionado y audible carraspeo.

—Buenas noches, lamento interrumpir, soy Park Changmin, bienvenido al aniversario de la corporación—Dijo dedicándole a Minho su peor mirada de jefe sádico.

—Idiota, Kibum—Saludo a Hae y Kib, recibiendo una maldición y una sonrisa respectivamente.

—Ah…Mucho gusto, soy Cho Kyu hyun. ¿Y tú debes ser el idiota que no quiere trabajar con Minho? ¿O me equivoco?—Minho miro acusadoramente a Donghae y sujeto el brazo de Changmin al verlo colocar esa fea expresión que siempre significaban horas extras para él.

—No le haga caso Changmin ah, hyung tiene un sentido del humor retorcido, ¿No es verdad?—Kyu hyun los observo con cuidado un momento y después asintió dándole un fuerte apretón de manos a Changmin.

—Por supuesto, solo era una broma.

—Disculpen, lamento la interrupción pero… Hola…—Dijo el muchacho de rosa que Kyu había visto medio desorientado hacía un momento.

— ¡Sungmin viniste!—El aludido asintió y observo con cuidado a los presentes—No tenía nada mejor que hacer— Le dijo a Donghae encogiéndose un poco de hombros.

—Junsu se va a morir cuando le diga que estas aquí—Se rio Kibum dándole una palmada ruda en la espalda.

— ¿Ya le dijiste? Mi hermano no vino ¿verdad? Se supone que nadie más sabía qu-!—

—Conejito—Susurro Minho colocándole una mano en la cabeza y otra en la cintura—Relájate—Le pidió bajo ya no una, sino dos miradas afiladas.

—Es fácil decirlo cuando no tienes a dos tipos que ni conoces mirándote feo—Le dijo bajito, haciéndolo consciente de Changmin, pues se dio cuenta que de algún modo Kyu no estaba viéndolo a él. ¡Y eso era tan bueno para el conejito!

—Lo siento, parece que esta noche está llena de sorpresas. Es un viejo amigo de Junsu y mío por su puesto y primo de Donghae hyung, así que él es mi jefe, Park Changmin—Dijo señalando al aludido—Y él es Kyu uno de mis hyungs favoritos—Comento Minho acentuando una creciente y extraña molestia en el estómago de Changmin— Les presento a Lee Sungmin.

—Es un placer conocerlos a ambos—Dijo haciéndoles una ligera reverencia, recibiendo un saludo similar por ambos tipos, cordial y aparentemente desinteresado.

— ¿Qué les parece si dejamos de entorpecer la entrada y vamos por un par de bocadillos?—Pregunto Minho al ver que de repente ya no tenía nada que decir.

— ¿Todavía quedan canapés de camarón?—Pregunto Changmin luciendo como un niño ingenuo.

—No lo sé, llamaré a Jaejoong para preguntarle, lo mejor será empezar por algo de beber—Exclamo acudiendo a su opción más desesperada, sentía que algo no andaba bien en el ambiente, pero quizás es que todos sus conocidos al parecer estaban viviendo bajo insoportables niveles de estrés.

—uh, aquí vamos—Dijo animándose así mismo antes de volver a supervisar todo y también mantener una conversación con sus amigos.

***

Junsu parecía un pez fuera del agua, Yoochun dijo que iba solo un momento al baño, por lo que decidió esperarlo antes de ir a buscar a Minho o empezar a gritar para encontrarlo en vista de que Chunie estaba tardando demasiado.

—E-Excuse me…—Junsu giro al escuchar ese suave siseo y se topó de frente con el chico más colorado y cachetón que había visto nunca. Y además embarazado, lindo.

Llevaba encima un bonito y caro suéter de la última colección petal del famosísimo Kim Heechul que le sentaba muy bien. Aún recordaba la insistencia de Jaejoong y los amigos de Minho de comprarle ropa de ese estilo para llevar el embarazo de In Hwan, siempre supuso que usar ropa cara no te volvía mejor padre así que simplemente siempre se negó a usarla.

—Yeah… What happened?— Tartamudeo Junsu recordando los cursos básicos de inglés que tomo en la escuela.

Un rictus de dolor atravesó el rostro del muchacho y rápidamente Junsu lo llevo a una esquina cerca de la salida para que respirase mejor.

— ¿¡Te duele!? ¿Cuántos meses tienes? ¿Quieres que llame a una ambulancia?—En su prisa Junsu olvido formular las preguntas en inglés pero sorpresivamente el muchacho negó repetidamente con sobre entendimiento diciéndole con un coreano torpe e infantil que tenía 7 meses… Por lo que el entendimiento llego a Su con bastante  rapidez y tranquilidad.

—Pesa demasiado ¿No?, Se mueve tanto que te asusta tenerlo dentro ¿Cierto?, Incluso te preguntas si puedes dejar de hacer pipí al menos en una hora entera ¿O me equivoco?—El chico abrió los ojos y asintió con firmeza, sintiéndose gratamente comprendido.

—Gracias, me llamo Henry, yo…I think… que no entenderías si intentaba hablar coreano… Not my thing…—Junsu rio al ver la frustración con la que intentaba construir las frases y terminaba mezclando idiomas.

—Comprendo y no te preocupes, incluso si haces señas con eso será suficiente. Conseguiré una silla para ti, espera aquí, ¡por cierto soy Junsu!—Dijo corriendo hacia las mesas de donde tomo una silla sin consultarlo si quiera para después atravesar la pista de baile de forma curiosa, llamando la atención de todos a su alrededor.

Al volver Junsu suspiro tranquilo al ver que Yoochun ya estaba buscándolo y parecía que el acompañante de Henry también había vuelto.

—beep, beep, silla en camino.— Susurro Junsu colocando la estructura contra la pared mientras Henry se desplomaba exhausto sobre ella riendo agradecido.

—Gracias Junsu shii, ¿Dónde estabas metido Hanie? Creí que tu hijo me mataría…—Refunfuño Henry haciendo un puchero ganándose un suspiro abatido del más grande.

— ¿Por qué es solo mi hijo cuando ya no puedes más?

—Porque para eso se supone que estas. —Respondió Junsu con simpleza riendo con estridencia, ganándose una mirada emocionada y curiosa de Han, quien después miro a Yoochun y luego regreso su vista a Junsu.

—No puedo creer que seas tú, Yoochun me lo ha contado todo desde que se enteró y solo puedo decir que es una noticia increíble, aún tenía mis dudas, pero tu risa las acaba de aclarar todas, ciertamente es peculiar—Dijo hanie estrechando con fuerza la mano de Junsu—Esta noche un amigo mío dijo que asistiría y se lo iba a presentar a Yoochun por si sabía algo de ti.

—Hangeng, nadie te pregunto—Farfullo Yoochun azorado mientras Junsu olvidaba de pronto su urgencia por encontrar a Minho, ¿Lo busco tanto? ¿Continuaría buscándolo si no estuviera junto a él en ese instante? Eso sí que era una revelación, pero lo fue más la siguiente frase de Henry.

—Ah, entonces invitaste a Sungmin no porque ese Eunhyuk termino con él sino por Yoochun y el muchacho “luces de colores”—Pregunto Henry avergonzando a Han mientras Junsu se sentía sofocado y se llevaba una mano  a la cabeza con incredulidad.

—No me jodas, no me jodas ¿Conoces a Lee Sungmin? No espera, ¿Cómo qué ese idiota de hyuk terminó con él?—

—Sungmin ah es el medio hermano del  dueño del ex dream ¿A caso tú lo conoces?—Cuestiono Yoochun algo confundido.

— ¿Qué si lo conozco? ¡Por supuesto que lo hago! Madre mía, Su novio es mi mejor amigo desde que puedo recordarlo, pero aun así voy a matarlo…—Farfullo pálido como una hoja de papel.

—Junsu ah…

—Oh, Yoochun…— Exclamo luciendo igual de abatido que él ratón quien además se veía demasiado vulnerable. — Solo tenías que hablar con Sungmin…

—La vida puede ser tan jodida –Gimió Hangeng recibiendo un suave apretón de manos por parte de Henry al sentir un movimiento brusco en el vientre, obligándolo a tocar su abultado estómago, mientras Yoochun alejaba algo agobiado la desazón que acababa de sentir por algo más interesante, observo la escena con ojos deslumbrados y maravillados, curioso, ilusionado e intrigado al colocarse junto a Junsu.

— ¿Qué?

—Nada.

Hangeng los volvió a mirar y sonrió incrédulo, Junsu estaba shockeado, frustrado, enojado con él mismo y con todo, dios es que no podían haber estado tan cerca y a la vez tan lejos….

Un ruidoso estruendo hizo saltar a Junsu sobre su lugar, de golpe recordó que se suponía que tenía que estar  haciendo y se sintió asustado, con el corazón oprimido y un fatal presentimiento a cuestas, solo  giró en busca de Minho con los ojos inundados de lágrimas.

—Jaejoong…—Sollozo al escuchar cristales rompiéndose y un montón de gritos y caos apoderándose del recinto, los insultos empezaron a escucharse  y corrió hasta el lugar de donde provenían tropezando de frente con Minho a mitad de camino quien lucía mucho peor que él. Lo primero que alcanzo a distinguir fue a Ed chan y el resto de la seguridad sacar a empujones a media docena de tipos con pinta de delincuentes que estaban amedrentando a los invitados y a Yunho en especial, ese que estaba moliendo a puños a…

—Tío…—Jadeo a Minho sosteniendo a Junsu por los brazos, ambos estaban paralizados mirando a su hermano ser auxiliado por una mujer terriblemente perpleja y angustiada.

De algún modo Yunho había terminado por sacar a su tío a la avenida principal y los guardias no pudieron más que someter a cuatro sujetos, dos de ellos se escabulleron del agarre y corrieron directamente hacia Yunho para ayudar a su jefe.

— ¡Chunie ah!—Grito Junsu al verlo correr hacia uno de ellos derribándolo con una poderosa tacleada que lo hizo rebotar contra el concreto violentamente.

— ¿¡Qué demonios pasa aquí!?—Se hizo escuchar el señor Park en medio del alboroto aunque de nada sirvió pues Yoochun continuo moliéndole la cara a ese gorila a puñetazos mientras Yunho hacía lo propio con ese gánster prepotente de Kim hyon su ahora enemigo declarado, nadie ponía a sus hijos a dar esa clase de espectáculos y se quedaba tan tranquilo, peor si alguien había llamado a la policía.

Changmin salió de entre la muchedumbre hecho una fiera el último de los hombres quiso escapar y Changmin le cerro el camino, no había estado en sus planes golpearlo pero al ver que no pensaba detenerse  le desfiguro el rostro de una patada en la cara que lo dejo inconsciente en el piso, viendo esto último algunos agentes policiales detuvieron a los agresores y en perplejidad Bae So Park y Han Mi Park vieron a sus hijos subirse a las patrullas como 3 delincuentes.

***

El lugar era estrecho y húmedo. Para Changmin aún era increíble encontrarse en ese sitio, era sencillamente ridículo, pero no podía hacer nada al respecto más que esperar, sentado en un rincón frente a sus hermanos, jugando con sus manos… En los separos del ministerio de justicia.

Yunho estaba asqueroso, golpeado y somnoliento. Yoochun simplemente parecía borracho, de los 3 era el más sereno y no sabía porque, pero podía firmar con su sangre que no era la primera vez que se hallaba en esa situación. De vez en cuando volteaba a ver a Junsu quien estaba pegado a la puerta de un pasillo como a 15 metros de distancia, le sonreía y el otro simplemente asentía volteándose frenético hacia Jaejoong quien empezaba a tener un serio moretón en el ojo y los labios totalmente reventados. Cuando Yunho lo miraba Changmin sabía que volvía a mirar rojo, si no fuera porque había una reja separándolos de su vecino su hermano mayor podría írsele encima de nuevo.

— ¡Oh, ya era hora! ¡Ahí viene Minho!— Gimió Yoochun aliviado, Changmin no le había visto el pelo durante toda la madrugada, pero estaba ojeroso, despeinado y pálido como un muerto. Él y Donghae acompañados de ese tipo, Kyu hyun atravesaron el pasillo frente a ellos que estaba cubierto con un cristal reforzado y entraron a las celdas escoltados por dos policías. Changmin se levantó imitando a sus hermanos creyendo que al fin terminaría esa locura, pero Minho paso de largo su celda, no los miro ni una vez hasta detenerse frente a la jaula de junto inspeccionando al maltrecho sujeto que había peleado con Yunho. Él y sus hermanos compartieron una mirada confusa, y todo el mundo que estaba esperando por ellos fue apartado de las rendijas desde las cuales los habían estado observando toda la noche, el rechinido de al lado reclamo de nuevo la atención de los Park. Donghae saco un cigarrillo y le pidió a un policía encenderlo mientras se alejaban de la celda permitiendo que Minho ingresara con la imponencia que toda su altura le otorgaba. Changmin no podía quitarle los ojos de encima, por ello no noto cuando Fish repartió con total descaro una obscena cantidad de billetes a cada uno de los policías que los habían acompañado.

—Buenos días Kookh Kim Hyon. ¿Dormiste bien Ajusshi?—Pregunto con las manos en la espalda mirando con desinterés el modo en el que el hombre se levantaba, haciendo un gran esfuerzo para mirarlo a los ojos aun después de erguirse en su nada despreciable altura.

—Minho, mi lindo sobrino…—Susurro con un tono repugnante de voz haciendo hervir la sangre de más de uno en ese lugar, acariciando de forma repulsiva y predadora el rostro de un Minho atormentado.

— ¿Sabes cuál es el problema de hombres cómo tú ajusshi?—Lo cuestiono el joven Kim mirando al frente ignorando el modo en el que estaba siendo tocado. Kim hyon rio arqueando las cejas irónico.

—No haberle enseñado su lugar a un par de huérfanos muertos de hambre en el momento adecuado—Respondió jactancioso logrando que Minho ahora si lo mirara.

—Equivocado—Respondió resuelto asfixiándolo con una sola mano después de impactarlo con el concreto a sus espaldas. Yunho y Yoochun saltaron asustados mirándose incrédulos, Changmin continuaba paralizado en su lugar, la mirada en los ojos de Minho era aterradora y afilada, desprovista de emoción alguna.

 —El problema con hombres como tú ajusshi…—Inició Minho con aire condescendiente—Es creer que las personas de quien abusan van a ser débiles y pequeñas toda su vida.

Kyu sonrió y lanzo el humo de su cigarrillo en perfectos círculos concéntricos.

Kim hyon empujo a Minho lleno de ira, el más joven de los Kim no tuvo que buscar mucho para encontrar suficientes razones para golpearlo. Un puñetazo impacto contra la caja torácica del hombre arrancándole el aire, un movimiento más fluido y elegante le rompió la nariz y Minho se encargó de destrozarle las costillas de dos furiosas patadas antes de que tocase el piso con toda la espalda. El verlo sangrar a borbotones de la nariz produjo en Minho una satisfacción enferma, se acuclillo y lo miro a la cara sonriendo, colocando sobre su pecho un documento pulcramente redactado.

—Es mi última advertencia legal tío, respeta el acta restrictiva o no me importara echar a perder mi vida para que mis hermanos vivan en paz. Acércate de nuevo a nosotros y un día de estos tu cuerpo despertara flotando en el Han junto a un montón de tus amigos. —Amenazó mirándolo sin hacerlo realmente. —Dale un beso a tía de mi parte. Fue bueno verte de nuevo, hace tiempo que debíamos solucionar las dificultades entre nosotros. Cuídate— Dijo ausente dándole un beso en la frente antes de levantarse y arreglarse cuidadoso las ropas buscando en el proceso su teléfono celular.

—Tú siempre fuiste tan parecido a mi…—Escupió Kim hyon mientras Minho se volteaba y sonreía marcando un número con eficacia.

—Si eso fuese cierto… hace años que te habría matado…—Dijo volviéndose para hablar con su mejor tono de voz por el celular caminando hasta estar frente a la celda de los Park con todo el profesionalismo que le quedaba, ignorando como su tío era sacado prácticamente arrastras de la celda contigua.

—Kibum ah dile a Sungmin shii que permita el pago de la fianza ya, si el juez no deja pasar a mis hermanos comunícame con el ministro y dile a todo el mundo que se tranquilice, los jefes están bien. Claro, yo me encargo del señor Park. Antes de que lo olvide, si la señorita Lee y Casandra shii tienen problemas en la empresa también diles que me llamen, estaré ahí en cuanto pueda.

—Definitivamente debí quedarme con Minho antes de dejarlo entrar a las corporaciones Park—Suspiro Donghae abatido saludando a Yunho, Yoochun y Changmin con una sonrisa circunstancial que no logro sacar de su estupor a ninguno de los 3 hermanos. Kyu hyun solo estaba pendiente de Minho observándolo con cautela.

 — ¡Hey, idiotas! Reaccionen. —Gruño Fish tronando los dedos frente al rostro de Yunho mientras Minho caminaba de un lado a otro hablando sin parar por el teléfono.

— ¿Qué demonios fue eso?—Pregunto Yoochun anonadado.

—hmn… —Exclamo encogiéndose de hombros—Viejas rencillas familiares, nada de qué preocuparse Minho puede manejarlo. Aunque tú también sabes de eso ¿no Yoochun?

— ¿Eres idiota?—Cuestiono Changmin bruscamente mirando a Minho con recelo, aunque ahí había algo más de respeto y admiración— Los problemas de Yoochun con madre están lejos de terminar en húmedas celdas o en asesinato.

—Si bueno Changmin, no todo el mundo nace siendo un bastardo con suerte y millonario como todos nosotros, agradece que Minho tenga ese carácter que acaba de salvar tu culo de pasar dos días más en este lugar. Tsk… Si esto les sorprendió hubiesen escuchado todo lo que les dijo al juez y al oficial que los detuvo.

Los Park se miraron entre sí de nuevo y guardaron silencio, más tarde podrían preguntar, pues el alivio inundo el rostro de Yoochun al ver a Junsu corriendo por el pasillo directo a los separos, seguido muy de cerca, claro, por Jaejoong.

— ¿Se encuentran bien?—Pregunto Minho tentativamente observándolos cuidadoso por si era capaz de notar alguna anomalía en ellos.

—Podríamos estar mejor pero gracias Minho—Exclamo Yunho encogiéndose de hombros.

—Oh, yo estoy bien. Me la he pasado en peores sitios—Dijo Chunie restándole importancia.

—Lo sabía— bufo Changmin cruzándose de brazos molesto, haciendo una mueca al oír el estrepito con el cual ingresaron los Kim restantes a la celda.

— ¡Chunie ah!—Grito Junsu prácticamente arrollando a Donghae quien miro a uno y a otro  antes de suspirar.

—Joder aun no me creo lo de ustedes dos… ¡Si lo hubiésemos sabido entonces!

—Donghae en verdad apreció lo que has hecho por nosotros pero cállate ya. —Bramo literalmente Jaejoong colocándose frente a Yunho con más calma y menos dramatismo romántico que Junsu, asintiendo al ver que en realidad no estaba tan mal como había esperado.

—Gracias. —Dijo, pasándole un par de prendas y algo de comida en envases desechables que habían ido a conseguir hacía rato. Había demasiada prensa y aunque esa situación ya era demasiado vergonzosa al menos podrían enfrentarse a ella sin parecer que los revolcaron en el lodo.

— ¿Qué es todo esto?—Pregunto Changmin revisando algo de su propia ropa y comida, dios gracias, comida.

—El señor Park les envió ropa, 3 autos y un equipo de seguridad para encargarse de la prensa. Jaejoong fue a conseguir algo sustancio de comer para que recuperen algo de energía, si necesitan algo más puedo conseguirlo ahora, lo que sea…—Explico Minho sin querer sonar desesperado, aunque por el modo en que lo miraron no lo logro.

—Tranquilo Minho…—Susurro Kyu palmeándole la espalda. Dejando su mamo ahí para darle algo de apoyo.

—Nadie necesita nada, salvo ustedes. —Exclamo Changmin señalándolos con algo de desinterés—Tú Jaejoong ir al médico a que te revisen esas heridas y tú…—Dijo mirando a Minho con fastidio—Un psiquiatra.

—Vete al diablo Changmin—Escupió Donghae asegurándose de sacar a Minho de ahí sin darle tiempo a decir más. Kyu hyun miro a Changmin con una sonrisa de campeonato y le arrojo el humo de su última calada antes de arrojar con aire distraído la colilla, saliendo en silencio de ese lugar, dejando a Changmin peor que si le hubiera dado un golpe.

—En serio vete al diablo, si no fuese por mi hermanito y sus ahorros, sus padres los habrían dejado aquí pagando las 72 horas de multa—Prolifero Junsu en mal estado saliendo tras Minho sin mirar atrás. Jaejoong suspiro más fuerte y se llevó una mano al rostro mirando agotado los ojos de Yunho.

—Disfrútenlo y arréglense un poco, yo creo que no necesitan más escándalos además de este…—Dijo retrocediendo un poco con una sonrisa que ninguno de ellos había visto en alguien más antes.

— No sé qué es lo que Minho les mostro pero en serio lamento haberlos involucrado en nuestros problemas familiares. Esta vez, al menos por mi parte, mi renuncia será definitiva, de lo contrario no podría asegurar que situaciones como las de ayer no se vuelvan a repetir. Lo siento y gracias por haberme ayudado Yunho shii, nadie jamás lo había hecho antes… Con permiso…—Dijo haciendo una larga y pronunciada reverencia antes de darse la vuelta y salir a paso seguro de ahí.

—Se va…—Exclamo Yunho sintiéndose horrible, no quería que se fuera, se moriría. Aunque si se quedaba sabía que algún día se matarían era preferible a simplemente alejarse de él.

—Changmin… ¿Por qué no solo aceptas que te encanta y dejas de jodernos la vida a todos los demás?—Gruño Yoochun irritado abrazando a Yunho con fuerza, intentando darle algo de consuelo mientras Changmin rodaba los ojos y les daba la espalda volviendo a su comida. Eso solo demostraba lo infantil que era con sus propios sentimientos y los de los demás.

***

Firmar, firmar, asentir y mirar a Jaejoong. Él y sus hermanos continuaban ensimismados en sus  propias cavilaciones mentales. Kibum y Sungmin además de Donghae y el tipo Cho eran las únicas caras conocidas que estaban cerca y al menos las fuerzas policiacas mantenían a raya a los periodistas, tampoco es que el enorme cuerpo desplegado que gritaba por todos lados ¡PARK! No los estuviera intimidando lo suficiente. Changmin no entendía como Yoochun podía soportar tanto acoso pero apenas le vieron el pelo los murmullos subieron de nivel, quería acercársele a Junsu pero entre tanta gente era imposible… Parecía hacerse evidente, ahora más que nunca, que entre ellos todo sería imposible si no se apresuraban en arreglar las cosas. Tenían una razón, una poderosa razón llamada In Hwan, pero todos se veían tan lastimados, como si no pudiesen esperar el momento de estar solos para poder llorar hasta desmayarse.

—Changmin shii, eso es todo. Pueden retirarse—Les dijo un oficial con tono afable y este asintió tomando una gran cantidad de papeles entre sus manos luego de levantarse, se dio la vuelta y empezó a caminar como príncipe hacia la salida rodeado por dos de esos mastodontes que había enviado su padre.

Yunho actuó antes de que algo más ocurriera.

—Minho ah cúbreme, quiero hablar con tu hermano…—Susurro parándose a su lado en el momento que tomo a Jaejoong del brazo y le coloco unos lentes oscuros. Minho asintió calmado y soltó la mano de su hyung para que pudiese salir con Yunho rodeado también por dos hombres de considerable altura, ellos necesitaban hablar, a ambos les haría bien y quizás hasta empezasen a llevarse mejor, más tranquilo giro a ver a sus amigos.

—Muchas gracias por todo chicos—Dijo ladeando el rostro un poco para reprimir un bostezo.

—No ha sido nada torpe—Exclamo Kibum dándole un suave apretón de manos apoyado en Donghae quien solo le sonrió negando lentamente.

—Si Minho, no ha sido nada, lo que sea por ustedes—Dijo Sungmin acercándose para darle un abrazo, sabía que lo necesitaba tanto. Kyu hyun solo lo miro y Minho sonrió asintiendo suavemente, regodeándose en esa mirada cálida.

—Gracias conejito, es bueno que en el fondo seas un abogado temible, me siento orgulloso de ti—Exclamo Junsu sin perder la oportunidad de apachurrarlo con fuerza.

— ¡Junsu yah!—Exclamo empezando a brincar con el cómo dos tontos.

—Bueno ya, ustedes dos vámonos de aquí—Suspiro Kibum empujándolos hacia la salida mientras Minho los seguía de cerca, estaba demasiado cansado, pero el día todavía no terminaba. Al salir Junsu iba bastante animado, sonriendo y haciendo chistes, Sungmin lo acompañaría a casa de Kevin por In Hwan y después probablemente irían a comer por ahí, Minho sabía que solo estaba evitando prestarle atención a Yoochun pues al parecer ya tenía demasiada, aunque no le pareciese lo más correcto, él no era quien para interferir más de lo necesario.

—Espérenme en la esquina chicos voy por el auto—Dijo Donghae caminando hacia el estacionamiento mientras los demás asentían  caminando hacia el sitio que les indico en medio de una charla cómoda y circunstancial, más tarde podrían hablar lo que necesitasen alejados de tanto bullicio.

— ¡Junsu!—Ese grito aturdió un poco al nombrado y ninguno pudo reprimir la sonrisa en el rostro que ello les provoco, Yoochun salió corriendo tras él mientras los dos tipos de seguridad que le correspondían retenían con más violencia de la que necesitaron sus otros dos hermanos a la prensa,  molestos flashes empezaron a caer sobre ellos y Sungmin rápidamente se colocó unos anteojos para impedir que la luz les molestase Minho y Kibum lucían simplemente fuera de lugar y Kyu hyun les lanzo una mirada con tal grado de amenazas y desprecio que  aterrorizados retrocedieron de nuevo.

—Lo lamento, —Exclamo Yoochun dirigiéndose solo a Junsu, luciendo bastante angustiado—Sé que Changmin es un idiota, yo sé que tú ya lo sabes pero necesitaba dejarlo claro porque no ha sido justo el modo en que trato a Minho, más aun después de sacarnos de ahí.

—Tienes razón Yoochun ah, y no ha sido nada pero yo tengo que irme justo ahora,  tengo que ir por In Hwan a casa de Kevin.

— ¿Tienen auto? ¿Quieres que te acerque?

—No, no es necesario Sungmin ah…—

—Sungmin ah estaba a punto de irse a descansar ¿No es cierto?—Interrumpió Kibum sonriendo abiertamente mientras el aludido asentía serio, sin dejar de ver con un poco de diversión la expresión azorada de Junsu.

— ¿Entonces, te llevo Su?—Pregunto Yoochun sonriendo calmadamente viendo enternecido el modo en que se encogía en sí mismo y asentía mordiéndose los labios.

—Nos vemos más tarde en casa Minho, come algo…—Pidió Junsu abrazándolo antes de seguir a Yoochun o más bien usarlo como escudo protector, no le gustaba que lo miraran, ni murmuran cosas raras ni tampoco que estuviesen tomándoles fotografías, pero ya no había nada que pudiera hacer al respecto así que rápidamente se subió al auto de Yoochun partiendo de ahí en busca de su hijo. Hubiera sido prudente dedicarles algo más de atención a los periodistas antes de alejarse así del lugar.

—En serio, esos dos…—Jadeo Sungmin incrédulo, riendo cálidamente al respecto topándose sin querer con la mirada de Kyu hyun puesta en él—uh-Debemos vernos en el nuevo sitio de Siwon, hay mucho de qué hablar, les llamo y nos ponemos de acuerdo ¿Sí?—Pregunto curioso sonriendo amistoso a ese chico, quien asintió con una risa predadora en el rostro.

—Por supuesto, creo que a todos nos sentara de maravilla después de lo de ayer—Dijo  Minho colocándose el abrigo, a pesar de ser relativamente temprano el día estaba extraño, un sol apagado y el aire demasiado frío para su gusto.

—Cuenta conmigo y con Hae, ve a descansar y gracias—Dijo Kibum dándole un abrazo antes de irse, después de todo eran familia.

—Dejen de darme las gracias, no fue nada, bueno en realidad sí, un costoso viaje en taxi al Ambassador…—Exclamo deteniendo el transporte.

—Oye espera, ¿te molestaría compartir? También voy a ese lugar—Explico Kyu encogiéndose sofisticadamente de hombros.

—uhm no-no puedes venir…—Dijo mirando la sonrisa pícara en el rostro de Minho— Nos vemos entonces chicos cuídense. Especialmente tú Minho. Voy a estarte vigilando —Exclamo Kyu hyun abrazándolo de imprevisto obsequiándoles una sonrisa antes de sostener la puerta para que Sungmin subiera  y así empezar a transitar por Seúl rumbo a su hotel.

—Minho.

— ¿Kibum ah?

—Creo que es un buen momento para decirte que el señor Park quiere verte con urgencia.

—Está bien. ¿Me llevarían?

—Sobre eso, Changmin está esperándote justo ahí—Dijo señalando la acera de enfrente, mientras Minho sentía nauseas—Al parecer su padre lo amenazó, si no te lleva con él, no lo dejará entrar a su casa.

—Mierda— Jadeo apoyándose en la pared antes de devolver el café y la dona que había comido a media mañana.

—Ya te habías tardado—Suspiro Kibum palmeándole la espalda mientras rebuscaba entre su chaqueta para darle algo de papel higiénico. Lo sintió temblar y sacudirse algo violentamente antes de incorporarse agarrotado, cuando la adrenalina se empieza a dispersar, las cosas en serio se ponen mal. Para alivio de Minho, Donghae se estacionó frente a ellos y rápidamente les abrió las puertas del auto, pero al alzar la mirada Changmin estaba justo enfrente suyo mirándolo de un modo inquietante que lo hizo agacharse de nuevo y temblar mientras escupía un repugnante y amargo líquido verde que le quemo la garganta y lo hizo sentirse como un trozo de mierda.

— ¡Madre mía! ¡Tú jamás puedes hacerme las cosas sencillas!—Recrimino Changmin pasándole una botella con agua mientras se ocupaba de sostenerlo con ayuda de Kibum mientras Minho mantenía la cabeza gacha apoyándose con una mano contra la pared.

Minho tardo bastante rato en recuperarse, aspirando grandes bocanadas de aire que eran como astillas en su cuerpo, pero que habían evitado un ataque de pánico. Lentamente se incorporó y con mucho talento evito mirar la angustia en los rostros de esas 3 personas.

—Lo siento. Ya estoy mejor, Donghae hyung pod- ¡Changmin ah!—Grito al ser arrastrado con fuerza por Changmin hasta su propio auto al otro lado de la calle.

—Cállate Kim y súbete al auto—Gimió deteniéndose a abrir la puerta para Minho, algo completamente contradictorio para el más joven cuando acababa de actuar como un idiota sin permitirle despedirse de sus amigos. Una vez el auto arranco y dos enormes sujetos se sentaron a su lado y el de Changmin, se apresuró en enviar un texto a Kibum tranquilizándolos al respecto, sabía que tenía que enfrentar a los Park más tarde que temprano y eso no significaba que se sintiera bien al respecto, pero el apretón que Changmin le dio en el cuello le brindo algo de serenidad y lo miro con angustia, ¿por qué actuaba como un desgraciado si siempre lo tocaba con tanta gentileza?

***

—Adelante. —Dijo Jae permitiendo que Yunho ingresara al pequeño recibidor de su apartamento. Estar ahí de nuevo fue extraño, al menos en esa situación, pero camino en silencio hasta la sala y se sentó en el sofá más grande.

— ¿Quieres café?

—Si claro, gracias.

—Bien, ya vuelvo—Dijo yendo a la cocina.

—No te apresures, no hay porque hacerlo…—

La velada del día de ayer era solo un borrón de imágenes a las que no podía darle coherencia hasta el momento exacto en el que había ido a la cocina con  Boa para presentarle a Jaejoong. La sangre le hervía de solo recordarlo…

Quizás debió escuchar a Boa cuando le dijo que el tal Kim Hyon era un delincuente… Probablemente no habrían encontrado a Jae siendo golpeado por dos tipos mientras Kim Hyon miraba impasible desde el otro lado de la habitación.  Aun sentía la rabia actuando por él, se le fue encima después de mandar a su amiga por ayuda y solo podía recordarse así mismo golpeando a ese hombre mientras Jaejoong intentaba detenerlo.

Arruinó el salón de baile, rompió los cristales que daban al jardín para sacar a ese hombre de su compañía y además compartió una pelea con sus hermanos, no habían reaccionado así desde que eran pequeños y fue bastante nostálgico, no recuerda cómo acabo todo, porque cuando reacciono estaba dentro de una patrulla, mirando esposado a través de un cristal el rostro lastimado y sangrante de Kim Jaejoong.

Lo que sintió le desgarro el alma y no quería que se repitiera nunca más.

—Toma… —Dijo Jaejoong dándole una enorme taza con café.

—Gracias Jaejoong.

—De nada. Bien. ¿De qué quieres hablar?

—Necesitas un empleo, sé que no volverás con nosotros, se te nota en los ojos, pero puedo encargarme del resto.

Jaejoong sorbió de su café y negó con seriedad, colocando su taza en el centro de la mesa.

—No es necesario. Hable con mis hermanos toda la noche al respecto. Nuestra casa tendrá que esperar un poco más, abriré mi propio restaurante. La idea era  hacerlo al menos en 5 años, pero mi querido tío se tuvo que aparecer a destruir los planes.

— ¿Qué hay con ese hombre? ¿Por qué te ataco?

—Cuando mamá y papá murieron dejaron una póliza de seguro a la que solo yo tengo acceso, también incluye varias propiedades e inversiones en la propia empresa de mi tío, lleva años queriéndonos quitar ese dinero aunque ya se hizo de las acciones y las propiedades, realmente no depende de mí, la condición que le dieron al notario fue otorgárnosla cuando mis hermanos y yo estuviésemos casados, por lo que dadas las circunstancias nadie puede tocar ese dinero ahora. Aunque no recuerdo ningún momento después de la muerte de nuestros padres en el que nosotros estuviésemos pensando en el dinero. Éramos niños, huérfanos y lo único que deseábamos era verlos de nuevo. Siempre hemos sabido que no accederíamos a ese dinero a corto plazo y con lo de Junsu, se volvió aún más evidente…

— ¿De qué hablas? ¿Con qué clase de idiotas tú y tus hermanos han pasado el tiempo? ¿Creen que nadie se casaría con ustedes? ¿¡Crees que nadie se casaría contigo!?—Pregunto completamente indignado sin esperar respuesta por parte de Jaejoong.

—No lo puedo creer eres un idiota. Te lo juro. Cualquiera con dos dedos de frente se perdería por tú sonrisa…—Acoto Yunho sulfurado mientas hacía un gesto desdeñoso al recordar lo dicho por Jae, ignorando lo que sus palabras provocaron en él.

— ¿Hasta tú?—Dijo boo riendo con nerviosismo, temblando asustado y triste, aguantándole las ganas de llorar mientras observaba un punto fijo entre sus manos— ¿Hasta alguien como tú sería capaz de casarse con alguien tan diferente e insignificante como yo?—Yunho trago saliva con pesadez y se levantó hasta sostener con delicadeza las manos de Jaejoong.

—Lo haría…—

“Si me quisieras…”

Pero Jaejoong rompió en un llanto silencioso, asustado, cansado, triste…

Yunho lo abrazo ocultándolo en su pecho, cuando los suspiros se volvieron sollozos, cuando estos se convirtieron en lamentos doloridos, cuando estos fueron gritos desgarradores… Yunho se quedó ahí, soportándolo todo por él, sin ser más que un objeto de esa habitación, su cerebro sabía que no significaba nada que Jae le mostrara su lado débil por las circunstancias, pero aun así… aun así… el corazón de Yunho Park era incapaz de entenderlo.

***

—Por aquí Junsu… Entra con cuidado…— Murmuro Yoochun haciéndole espacio en su departamento. Habían ido por In Hwan a la casa de su jefe de seguridad y tuvieron que separar a su hijo de Kevin mientras dormía o de lo contrario habría ocurrido un drama, no sabía qué clase de relación mantenía su bebe con ese chico pero sentía una picazón extraña en el pecho que lo hacía querer gruñirle. Eduardo era simpático pero sumamente sobreprotector y aun le dolía la “felicitación” que le dio por la tacleada que le dio a uno de los hombres con los que pelearon, también se disculpó por no haber hecho bien su trabajo pero eso no era tan importante como el hecho de tener a Junsu y a su hijo en su casa.

—Es lindo…—Dijo Su caminando con I Hwan en brazos hasta la sala de Yoochun donde este último dejo las cosas de Junsu y propias en un sofá. Junsu observo en silencio y sin querer los recuerdos volvieron a su mente apenándolo un poco.

—Gracias Junsu, ¿Quieres tomar algo?

—No gracias, la verdad es que no tengo ganas de nada…—Dijo de pie mirando curioso los objetos en su librero mientras bostezaba sonoramente.

—Está bien, sígueme. —Pidió quitándole a su desmayado primogénito de los brazos, guiándolo por un pasillo largo y ancho hasta una enorme habitación al fondo. Era un sitio cálido y confortable y Junsu se sintió adormecido apenas entrar ahí. Compartió una sonrisa con Chunie y se sentó a orillas de la cama al verlo acomodar a su pequeño entre las mantas.

—Gracias Yoochunie pero también deberías dormir, te hará bien…

—A todos…—Respondió sacando de una cajonera una camiseta y un pantalón de pijama para que Junsu se quitara esas ropas—Por favor Junsu…—Insistió al ver su mueca indecisa, dudo un poco pero al final acepto la ropa y sonrió.

— ¿Puedo usar tu baño Chunie?

—Claro es la puerta a mis espaldas—Dijo señalándola con los ojos casi cerrados.

Junsu le sonrió y fue al baño a colocarse la ropa sin poder evitar suspirar al sentir un ligero olorcillo a Yoochun por todas partes. Se lavó las manos y el rostro y volvió a pensar que mejor debió ir a casa, pero solo de recordar que Jaejoong y Yunho estarían ahí también, se sintió sumamente abrumado.

Si hubiese ido en busca de Minho o le hubiese pedido ayuda a Chunie, no hubiera ocurrido nada de eso o quizás no pudo haber sido tan malo.

Cuando volvió a la habitación se encontró una imagen que le acelero el pulso y calentó su pecho, Yoochun yacía plácidamente dormido acurrucado junto a In Hwan en posiciones casi idénticas, y Junsu comprendió con una sonrisa a quien le heredo la forma de dormir. En silencio coloco su ropa sobre una silla y cubrió con las mantas a sus dos chicos, acurrucándose al otro lado de In Hwan con los sentidos embotados…

Apenas toco la almohada sus ojos se cerraron y después el silencio reino por completo en la habitación…

***

—Cariño…—Suspiró Han Mi apenas Changmin cruzo la puerta de su casa, lucía totalmente destrozada, Minho jamás imagino que debajo de tanta clase, altivez y elegancia, pudiese existir ese estropajo de persona.

—Mamá…—Susurro Changmin abrazándola fuertemente mientras Minho se quedaba prudentemente alejado de ellos.

— ¿Has visto los periódicos? Mi amor la ruina ha llegado a esta familia, ¿Cómo es posible que Yoochun nos haya hecho esto?

Changmin trago pesado y se a parto mirando la expresión destrozada de su madre, volteando furioso a ver a Minho, como si todo fuese culpa suya.

— ¿Qué tiene que ver Yoochun en todo esto madre?

Han Mi sorbió ruidosamente por la nariz y comenzó a llorar con amargura acurrucándose contra el pecho de Changmin.

— ¡Tiene un hijo! Changminie tiene un hijo…— El piso desapareció para Minho intentando procesar lo que había pasado.

— ¡Kim! El señor Park te espera en su despacho—Minho boto sobre sí mismo angustiado y avanzo como si estuviese muerto hacia Hankyung shii, Changmin lo miro sintiéndose incrédulo y preocupado por Minho a la vez, el tipo valiente y amenazante que acababa de defender a sus hermanos se había ido, solo quedaba un adolescente asustado y tembloroso que hacia un esfuerzo inhumano por no echarse a correr, las lágrimas no las había podido contener…

—Hankyung encárgate de mamá, voy a hablar con padre sobre esto...—El aludido asintió y sostuvo a la señora dirigiéndola con lentitud hacia la cocina.

—Changminie haz que los despidan a todos,  no los quiero cerca de nosotros…—Sollozo su madre antes de irse mientras Changmin la observaba consternado, la puerta del despacho de su padre cerrándose con pestillo lo saco de su ensueño y corrió hacia él sin saber qué hacer.

***

—H-Hola…señor…—

—Minho…—Susurro el hombre mirando una cantidad inmensa de documentos en sus escritorio, su Tablet estaba encendida y parecía que ahí también había algo que lo tenía completamente ensimismado.

—Lo siento…—Dijo deteniéndose al centro de la habitación limpiándose apurado el rostro, intentando que no lo viera. ¿Qué hacía? ¿Qué harían? ¿Cómo iban a solucionar ese problema?

—Me han obligado a investigarlos a fondo muchacho, lo de ayer fue solo el detonante… —

—Yo puedo explicarlo aunque no me corresponde, por favor déjeme decirle lo que ha pasado…—Bae so negó con suavidad y Minho se silenció abruptamente, mirándolo desesperado.

—No entiendo…—Dijo caminando despacio hasta estar enfrente de él—Si necesitabas ayuda, si necesitaban ayuda… ¿Por qué me lo ocultaron?—Minho lo miro confundido y descubrió que el rostro del señor Park lucía más dolido que molesto, más comprensivo que acusador, más… más…

—Lo siento, no era intención nuestra, solo queríamos vivir distinto… Y al final todo empero…—sollozo cubriéndose el rostro mientras empezaba a temblar con angustia…

Suaves toques a la puerta fueron ignorados mientras Minho lloraba más fuerte intentando mantenerse sereno…

—Ven acá hijo, desahógate…—Suspiro Bae Soo, abrazándolo dejándolo recargarse contra su cuerpo mientras la puerta empezaba a ceder…

—Cuantos años has cargado tantas cosas para ti mismo, sin la compañía de un padre… Lo siento muchacho, lo siento…—Minho se desplomo cansado pero se sintió increíblemente feliz y triste a la vez cuando volvieron a abrazarlo, era cálido y reconfortante, era abrumador ver la mirada comprensiva en el rostro del señor Park…

— ¡Papá ábreme! ¿¡Qué está sucediendo!? ¡Por favor déjame entrar!—

—Lo siento, eso ha sido, lo siento mucho señor, no queríamos… Nosotros no queríamos nada de esto ni si quiera sabíamos que…—Minho hizo un esfuerzo inhumano por tragarse las lágrimas y volvió a disculparse porque no sabía que otra cosa se suponía que tenía que hacer.

La puerta se abrió con un estruendo y Changmin ingreso al despacho con el rostro repleto de angustia  y Minho se enfrentó sin querer al rostro de Changmin quien se quedó paralizado al verlo,  no sabía qué hacer, solo miro suplicante la expresión agobiada de su padre y sonrió al verlo asentir con suavidad.

—Gracias…

—Aun no me las des hijo, quiero detalles y saber cómo demonios te vas a enfrentar a la prensa.

Changmin asintió y tomo a Minho por los hombros obligándolo a sentarse en la mesa frente a su padre mientras el hacía lo mismo. Ya todo el mundo lo sabía, lo importante era saber ¿Que iban a hacer ahora con Yoochun y Junsu? Él no quería que In Hwan se fuera y mucho menos se desharía de Minho, ni si quiera por su madre, sobre todo por ella. Era inútil continuar negándolo. Había algo en Minho que simplemente lo enfermaba, tanto que podría colapsar si lo alejaban de él.

Continuará…