Capítulo 3 The Warmth Of Your Gaze.

Capítulo 3: Dulce Recuerdo, Hermosa Realidad.

Porque no olvidaré ni el cariño que me diste,
Ni ese dolor que casi me destruyó…
aunque estemos apartados,
Solo este amor no volverá a perderse…
Si mis sentimientos se volviesen nieve,
Podrían alcanzar el lugar donde estás…
Aunque incluso si no puedo verte, seguiré queriéndote sólo a ti…

Kono Yoru Ga Owaru Mae Ni-Gackt.

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“Embarazado…” esa palabra…esa palabra resonó con fuerza en su cabeza cuando el doctor la dijo en el consultorio del hospital, se encerró en su mundo y dejo de ser consciente de todo a su alrededor, ni de la impresión que le causo a Hyuk, ni de la mueca preocupada de Minho, y se esforzó aún más en no ver a Jaejoong a la cara, la decepción que debería mostrar el rostro de su hermano es algo para lo que no estaba preparado.

Ni si quiera una mínima expresión asalto su rostro en el transcurso del hospital a su casa en el auto de su amigo, tampoco presto atención a las palabras reconfortantes y alegres que Hyuk y Sungmin le regalaban tras superar la noticia, después de todo su situación no era del todo extraña, aunque ellos no supieran lo que ello implicaba.

Cuando bajaron del auto y escucho el “nos vemos el lunes” de esos dos, fue cuando el aire le abofeteo los sentidos, estaban frente a su edificio y aún así todos se mantuvieron en silencio la tensión era palpable y el empezaba a analizar la situación, su situación, la de su bebe, la de ese pequeñito ser que sabía lo colmaría de alegrías, que solo pudo haber sido concebido en aquella ocasión, aquella única ocasión en la que dejo que alguien lo tocara, aquella primera vez que fue más de lo que él pudo esperar, aquella vez en la que se perdió en una cálida mirada y aquella vez en la que dejo su ser y corazón en las manos de Yoochun el hombre que lo había hecho temblar solo con un par de horas de conexión, logrando sentirse especial...

De repente comenzó a temblar ahora estaban en medio de esas 4 paredes que conformaban la humilde y cómoda sala de su apartamento, y ya nada podía hacer solo levantar la cabeza y enfrentar todo lo que vendría.

-¿Quién es…?-pregunto Jaejoong controlando el tono de su voz, con Minho a lado suyo mirando a junsu sin poder evitar sentirse mal pero lo suficientemente sereno como para tranquilizar a Jaejoong.

-Se llama Yoochun…-

-¿Y donde vive, qué hace ¡¡ DESDE CUANDO LO CONOCES!!?-Grito sin poder contenerse más.

-Solo…solo se su nombre…-

-¡¡QUE!! ¡¡ESCUCHATE JUNSU!! ¿PIENSAS TENER ASÍ UN HIJO?- Esa pregunta…esa pregunta que le decía que si tal vez se decía de ese pequeño y diminuto ser todo estaría bien nada…nada le impediría seguir adelante, más que la irremediable culpa de matar a su bebe y eso no podía… no podía hacerlo…

Las lágrimas se deslizaron silenciosas por sus mejillas mordiéndose los labios temblando de impotencia, suspiro ruidosamente y levanto la mirada.

-Quiero tenerlo…-murmuro en voz baja, aún inseguro y sin convicción.

-Junsu ni si quiera puedes con tu vida ¿qué vamos a hacer con un bebe? ¿Cómo lo mantendremos? ¿Qué le dirás cuando pregunte quién es su papá?-pregunto con voz cansada y una expresión fría en el rostro.

-¡Oh! Ya se… “Es un tipo con el que me acosté una noche y se llama Yoochun…” no me hagas reír…-murmuro con sarcasmo y dolor, mientras Minho solo podía observar, que hacía, maldición que podía hacer…

Un sollozo audible y doloroso llego a Jaejoong removiéndole las entrañas, porque por dios Junsu era su hermano- ¡¡Quiero tenerlo!!-volvió a murmurar con la serenidad renovada y una convicción inquebrantable.

-Porque es mi bebe, si el pregunta por su appa le voy a decir que conmigo le basta y le sobra, puedo dejar la universidad pero mi hijo va a tener una vida mejor que la mía, aún si no puedo encontrar nunca a Yoochun ¿y sabes qué? no me importaría porque el recuerdo de esa noche me puede llenar de amor y calor toda la vida, pero ¿qué puedes saber tú?, el perfecto Jaejoong, el hermoso Jaejoong, quien es tan cálido como una madre y que cuido a sus hermanos tras la muerte de sus padres siendo apenas un adolescente… ¡¡Pero que aleja a cualquiera que puede amarlo con locura, solo por miedo y egoísmo!!-Grito lleno de rabia dejando salir más lagrimas de sus ojos.

-Eres un estúpido Junsu… ¡¡Eres el Estúpido más grande del mundo!!-grito caminando con furia hacia él.

-¡¡Jaejoong!!-grito Minho intentando frenarlo, ganándose un empujón que lo alejo varios pasos, junsu se encogió en sí mismo esperando la bofetada que nunca llego, siendo presa de los brazos asfixiantes de Jaejoong.

-Eres un estúpido…al pensar que te dejaría solo, ¿cómo crees que te pediría que abortases?, eres un idiota, idiota, idiota…-murmuro de forma ahogada y entrecortada por las lagrimas abrazando a Junsu con más fuerza. Minho suspiro aliviado y una sonrisa se le formo en los labios.

-Jaejoong-ah yo también quiero ser un estúpido…-murmuro Minho abrazando a sus hermanos, haciéndolos reír aún con las lagrimas surcándoles el rostro.

-No tú sigue igual es más…voy a comprarte un cinturón de castidad…-murmuro Jaejoong tragándose las lagrimas, y junsu sintió como el alma le volvía al cuerpo, porque lo que dijo es lo que realmente pensaba, si sus hermanos iban a abandonarlo no importaría y él se iría y buscaría ser feliz con su bebe, aunque siendo realmente sinceros era muy bueno que sus hermanos no lo fueran a dejar solo, porque sencillamente no sabría qué hacer.

Ahora estaban todos en la habitación de Jaejoong, envueltos en las sabanas mientras junsu no dejaba de llorar, ni agradecer al cielo y a sus padres el haberle regalado dos hermanos como los que tenía.

-No puedo creerlo junsu te robaste una foto del tipo ¿cuando era un bebe?-pregunto Jaejoong sonándose la nariz, sin poder evitar reírse con ganas de la estupidez de su hermano.

-Fue lo mismo que yo le dije cuando me la enseño, ¡ah! pero el bien emocionado, mi primer pensamiento fue algo así como “que enfermo…”-continuo Minho quien junto con jaejoong siguieron riéndose de junsu.

-Es que no se me ocurrió tomarle una foto, lo único que quería era dejar de verlo encuerado…-murmuro riéndose y limpiándose la cara.

Jaejoong se sentó de golpe en la cama viéndolo de forma inquisidora con una sonrisita perversona perfilada en sus rojitos labios.

-¿Y está bueno?- pregunto abruptamente, minho tuvo un repentino ataque de risa y Junsu paso por todas las tonalidades de rojo en el espectro.

-…Sí-respondió para enredarse entre las mantas después de escuchar el grito maniático que soltó Jaejoong.

-¡Junsu ah tienes que contarnos!-inquirió Jae molesto saltando sobre el pegándole en el trasero.

-No la verdad no tiene que hacerlo-interrumpió minho ganándose un almohadazo por parte de su hermano mayor, viendo como estaban esos dos de pesados prefirió desistir aunque ya se encargaría de sacarles la sopa después.

-Bueno ¿y qué? ¿Se piensan dormir en mi cama?-Pregunto al verlos acomodarse entre sus mantas.

-Sí- contestaron al unísono ignorándolo y tapándose bien.

-Pero ya están grandes, eso lo hacían cuando tenían como 10 años…-murmuro sonriendo melancólico, cuando tenían miedo y ya no había nadie con quien correr a esconderse más que él, o cuando hacía frío o simplemente necesitaban fastidiarlo para que les diera galletas y leche, pero ahora solo querían un poquito de fuerza y seguridad, querían prepararse para poder enfrentar todo lo que venía con más disposición y algarabía de la que poseían ahora, solo para estar más juntos y unidos que nunca.

Después de disipar la nubosidad de su cabeza jaejoong también se puso pijama y beso las mejillas de sus hermanos antes de hacerse un espacio en la cama y acurrucarse, quedándose dormido después de tan impactante pero importante noticia…

**********

Varios días después, Seúl.

Estaba rodeado de cámaras, empresarios y personas que no conocía y sinceramente tampoco quería tratar, la sonrisa en su rostro era hipócrita y escueta pero al menos trataba de disimular que realmente estaba feliz por hacerse con la dirección de las Corporaciones Park junto con sus hermanos, Yunho Park su hermano mayor sustituiría a su padre en la presidencia, el se encargaría de la Vice presidencia y su hermano menor Changmin Park se encargaría de cualquier movimiento financiero en el que se viera envuelta la empresa, la última conversación que habían llevado a cabo los tres, resulto como cualquier otra: llena de frivolidad, reclamos e hipocresía, pero ante todos eran la familia perfecta, no que no se quisieran, sencillamente nunca los enseñaron a llevarse bien como hermanos y a esas alturas de sus vidas ya no era necesario, entre menos se entrometieran en sus propios asuntos , mejor para todos.


Y de nueva cuenta la mirada de Yoochun se perdió en su más reciente y apreciado recuerdo el bonito castaño de nombre Junsu y la única razón por la cual había pedido la ayuda de Yunho, Hankyung no tenía ni pistas ni información sobre el chico, Yoochun ya no podía volver a desaparecer así como así y su hermano puso a diversos investigadores a buscar a su más reciente “capricho” como había sido denominado por Changmin, simplemente esperaba poder verlo lo más pronto posible se estaba muriendo y todo había cambiado ya para él.

-Vámonos Yoochun se nos hace tarde y tenemos que ir a entretener a esas “damas”…-siseo su hermano menor con desagrado.

-¡Oh! Minie vamos si son tú tipo de mujer-

-Esas no son el tipo de nadie…-carraspeo Yunho acomodándose el saco.

-Al menos en este aspecto es en lo único en lo que coincidimos…-se encaminaron a la salida riéndose un poco más relajados, después de todo iban directamente hacia el infierno.

Fuera del edificio solo pudo sonreír al mirar el cielo, ojala algún día pudiera convertirse en un ave y desplegar las alas para ir en busca de sus sueños.
“Cada vez me pongo más cursi, ¡aish! espero verte pronto además ni creas que he olvidado que te llevaste esa vergonzosa fotografía…” río con ternura antes de subirse a la limosina, llamando la atención de sus hermanos quienes extrañados lo siguieron replanteándose realmente si ese tal “junsu” era un capricho, nunca lo habían visto tan idiota por una persona usualmente los olvidaba al día siguiente.

El automóvil se puso en marcha y los tres hermanos se dirigieron al cumplimiento de sus obligaciones.

**********

-¡Junsu-ah no te olvides de comer bien y tomarte el acido fólico¡-le grito jaejoong antes de que saliera disparado de su casa hacia la escuela apenas tenía 2 meses de embarazo y por suerte ya casi no tenía ningún síntoma, sin mencionar que Jaejoong le preparaba ricas galletas de avena por si acaso, era genial tener un hermano chef, porque además le preparaba todo lo que a su bebe se le antojaba, que por cierto no eran cosas sencillas.

Salió presuroso de su edificio encaminándose a paso tranquilo a la parada del autobús donde se llevo un susto de muerte cuando instantes después hyuk se estaciono con un ruidoso rechinido provocado por las costosas llantas de su convertible frente a él.

-¡Hola! Futuro madre señora ¡sube!- Junsu arqueo una ceja con un puchero en los labios ¿Qué hacia él ahí? Nunca había ido a recogerlo.

-Súbete, que lo hago por mi futuro ahijado hay que empezar a consentirlo desde ahorita- Y entonces a Junsu se le llenaron los ojos de lagrimas espantando a Hyuk quien se bajo apresurado del auto y lo abrazo obligándolo a subirse.

-¿Por qué lloras?-le pregunto una vez se pusieron en marcha.

-Porque…-hipo-nunca...habías venido por mí… y ahora lo haces porque estoy embarazado…-sollozo de forma ruidosa y lastimera haciendo sentir mal a su oyente.
-Lo siento Junsu…yo no…-empezó a disculparse.

-¿Por qué te disculpas?-le pregunto junsu de repente interrumpiéndolo.

-¿he?-

El castaño sonrió después de forma segadora.

-Me emocione porque eso quiere decir que me quieres mucho y que también vas a querer mucho a mi bebe, por cierto ¿podemos pasar a comprar unas donas con mantequilla rellenas de chocolate y una coca cola? Es que a mi bebe ya le dio hambre otra vez…

Hyuk prefirió seguir conduciendo deteniéndose en la primera pastelería que vio, de sobra esta decir que no sabría cómo lidiar con los bipolares cambios de humor de junsu y que a este paso solo aumentarían. Después de varias paradas más, por fin pudieron llegar a la universidad donde Sungmin los esperaba sonriente.

-Buenos días Junsu-ah, he traído un regalo para ti y para el bebe-le sonrió entregándole una bolsa de alguna tienda costosa, regalándole un beso a Hyuk.

-¡Ahhh! ¡Qué bonito y es a juego!-grito de repente sobresaltando a Hyuk quien se llevo una mano al pecho viendo el regalo que su había recibido bastante contrariado, un mameluco rosa con orejitas de conejo y una ancha camisa también rosada de maternidad para caballeros.

-No empieces hyuky me encanta el rosa ¿y te imaginas un bebe recién nacido rosadito y tierno vestido con un mameluco de conejito?-pregunto ilusionado, volteando a mirarlo.

-Eun Hyuk quiero tener un bebe-Sentencio con seriedad el rosadito, llamando la atención de junsu quien comenzó a reírse de la mueca impávida y asustada de su amigo, ni si quiera respiraba.

-Hem…junsu oppa…-hablaron bajito a sus espaldas.

-Mande-respondió sin dejar de comerse la ultima bolsa de papas que le había sacado a Hyuk.

-Bueno… nosotras… nos preguntamos sí…-Junsu al ver su indecisión se les adelanto.
-¿Quieren ver mi vientre?, aún no estoy gordo-aseguró intentando levantarse la playera momento que aprovecho Eun poniéndose en medio de él y de las chicas escapando así de las presiones de su novio.

-Esperen señoritas todo en esta vida es un milagro, pero como tal tiene un costo 5 won por verlo y 10 por tocarlo-

-¡Hecho!- gritaron las chicas pagándole 20 won acercándose a junsu quien comenzó a reírse cuando empezaron a palpar con suavidad su estomago.

-¿Oppa cuanto tienes?, ¿Te alimentas bien?, ¿Te importaría si llevamos un registro de tu embarazo? Es que es un trabajo…-murmuro una de ellas sin dejar de hacer reír a Junsu.

-Supongo que no tiene nada de malo…-respondió acabándose su bolsa de papas, comenzando a contestar el exhaustivo interrogatorio al que lo estaban sometiendo.

“¿Qué estarás haciendo…?”

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Departamento de Park Yoochun, Seúl.

Eran las 9 de la mañana y nunca había tenido un despertar tan desagradable, ni si quiera cuando se la pasaba de juerga toda la noche, se abrazo de nueva cuenta al inodoro y empezó a vomitar otra vez, todo porque le había dado asco el aroma de la bolsa de comida tailandesa que Yunho le había llevado, algo quería porque si no, no habría ido a su casa.

Tocaron a la puerta con suavidad, cuando creyeron que Yoochun había dejado de lanzar los intestinos por la boca.

-¿Estás bien?- Yoochun respiro y entorno los ojos, se levanto del piso, le jalo al baño y comenzó a enjuagarse la boca abriendo la puerta.

-Te traje un vaso con agua, ¿Estás enfermo o algo así?-

-No creo, pero gracias…- le sonrió a Yunho dirigiéndose a la cocina de su apartamento para ver a Changmin atragantarse con la comida que le había dado asco y se sujeto con fuerza a una trabe cuando un repentino mareo lo asalto.

-¿qué te pasa yoochun?-indago min sin dejar de comer ni tampoco dejar de observarlo.

-No se…-murmuro frotándose la cabeza con aprehensión.

Chang lo observo unos instantes antes de sentenciar con voz burlona-De seguro estás embarazado con las borracheras que te metes no sería raro que alguien te la hubiera metido…-resoplo de forma seria sorprendiendo a sus hermanos mayores y ahora fue Yunho quien se sujeto con fuerza de la pared.

Yoochun respiro con fuerza si de algo estaba seguro es de que nunca en su vida había sido pasivo, aunque aparte de junsu nunca lo había hecho con otro chico.

-Bueno dejen de hablar estupideces ¿qué quieren?-

-¡Oh sí! Te traje los resultados de la investigación aunque la verdad no son muy satisfactorios, nadie ha visto de nuevo al chico con el que estuviste esa noche, ni siquiera los orangutanes que los sacaron…-le dijo Yunho pasándole un folder con papeles.

-¿Estás seguro de que no conoces el apellido?-pregunto esta vez Changmin con expresión ausente.

-Ya te dije que no…-respondió con brusquedad sentándose en uno de sus amplios sillones, ahora le estaba doliendo la cabeza.

-Bueno también hablamos con nuestro Padre…-tras lo último dicho por Yunho, Yoochun se tenso visiblemente.

-Al parecer convencerá a madre para que deje de intentar casarnos con esas tres, que si bien son de los mejores partidos a los que podremos aspirar…- dijo Changmin
-…También está de acuerdo en que son detestables y no las quiere en la familia, solamente Soo Man puede con ellas…-continuo Yunho, los tres sonrieron satisfechos y respiraron la libertad después de todo su padre no era tan malo y menos ahora que estaba complacido con el desempeño que los tres habían tenido últimamente con respecto al manejo de la empresa.

-Bueno que les parece si vamos a comer algo que no sea comida tailandesa ni que huela asqueroso, esto hay que celebrarlo…-les dijo Yoochun más animado levantándose del sillón mirando de soslayo los papeles que Yunho le había entregado.
-Pero tu pagas-respondieron ambos al unisonó encogiéndose de hombros tras verlo perderse por los pasillos de su apartamento.

**********

Eran las 4 de la mañana y en el apartamento de los hermanos Kim la luz de la cocina y de una habitación estaban encendidas, mientras Minho preparaba leche con chocolate y hacía pan tostado con mermelada para Junsu, quien ya estaba entrando a su cuarto mes de embarazo y no iba a negarlo los tres estaban bastante emocionados por lo bien que iba según el reciente ultrasonido que se había hecho su hermano, esa misma tarde jaejoong le había traído unas cuantas prendas de maternidad que hacían ver a Su bastante angelical sin mencionar que su vientre ya estaba un tanto abultado, pero eso no era justificación para que lo levantara a las cuatro de la mañana a prepararle sus antojos, y era en momentos como esos en los cuales odiaba al desgraciado animal que se había metido con junsu, pero bueno eso era mejor que despertar a Jaejoong porque estaba seguro que si eso pasaba ardería Troya, había conseguido un nuevo trabajo pero la situación con el nuevo jefe era bastante estresante para él así que era preferible no molestarlo, además era él quien lidiaba con los cambios de humor de su encantador hermano y eso lo agradecía bastante. Minho había conseguido trabajo en la cafetería de la universidad y pues al menos le iba bien y tenía buenos amigos que le hacían compañía en sus ratos libres. Se encamino entre tropezones a la habitación haciendo a un lado el montón de bolsas y regalos que se estaban acumulando, el bebe de junsu definitivamente era sumamente popular y esperado según les había contado hasta algunos profesores le habían llevado algún presente.

-Junsu ah toma-le dijo pasándole la bandeja de comida en la que llevaba lo que había preparado dejándose caer a su lado abrazando un almohada dispuesto a dormirse.

-¡Gracias!, ¡gracias!, pensé que ya no me lo ibas a preparar o que te habías quedado dormido encima de la licuadora como el otro día…-le murmuro comenzando a mordisquear el pan y a tomarse la leche apresurado.

-Hum…-

Junsu volteo a mirar a su hermanito quien le daba la espalda abrazado a esa almohada muy cómodamente, mientras el mismo acariciaba mimosamente y de forma un tanto insegura su ya abultado vientre mordiendo sus labios nervioso, la verdad es que no tenía hambre, bueno al menos no mucha, solo quería hacerle una pregunta a Minho.

-¿Crees que haya sido lo mejor decidir tener a este niño?-soltó al viento de forma directa sin esforzarse en disfrazar un poco la oración.
Minho entonces abrió los ojos sorprendido despertando completamente sentándose en la cama, ¿qué es lo que le pasaba a Junsu? siempre decía mi bebe o mi precioso ratoncito.

-Es solo que…cuando salgo a caminar al parque veo a las familias: un papá, una mamá y el precioso bebe, y pues yo no creo ver nunca más a Yoochun…-dijo serio con la mirada perdida acariciando su barriguita.

-¿Pero no has sido tú quien ha dicho que no importa? ¿Que a tu bebe no le hará falta nunca nada y que contigo basta y sobra?-Le dijo Minho sonriendo con confianza.

-Además estamos Jaejoong y Yo, bueno jae puede ser la umma y también esta hyuk y el rosadito tu nada más elige, se a lo que te refieres pero ya encontraras a una buena persona de quien enamorarte al menos que nos dejes continuar buscando a Yoochun…- le indico acostándose sobre la pancita de su hermano.

-Se que lo han estado buscando pero ¿cómo piensan encontrarlo si solo conozco el nombre?-le dijo sonriendo ahora más confiado.

-No perdemos nada intentándolo, además apuesto que el también te busca…-

-Yo no lo creo…-

-Vamos junsu uno nunca sabe además ya todos queremos que nazca este pequeñajo y si yoochun lo supiera también estaría ansioso ¿Verdad?-pregunto con un tono infantil sobre la barriguita de su hermano y como si el bebe realmente comprendiera se movió ligera y casi imperceptiblemente, pero ahí estaba intentando reconfortar a su papi.

-¡Se movió!-grito Minho tocando la protuberancia con cariño.

-¡Junsu se movió!-grito emocionado sintiendo un suave y más perceptible movimiento poniéndose en pie de un salto.

-Voy por Jaejoong tal vez me golpeara por despertarlo pero si no lo despierto me golpeara más duro cuando se entere-salió corriendo dejando a junsu en la habitación impávido y emocionado sonriendo cuando las lagrimas se deslizaron de sus ojos.

-No pude tomar una mejor decisión en la vida, te quiero te quiero…-murmuro con leves sollozos abrazando su barriguita, mientras jaejoong entraba casi destrozando la puerta más dormido que despierto y con el cabello revuelto.

-¡Mi sobrino!-grito, corriendo a sentarse a un lado de junsu espabilándose, poniéndole una mano sobre el vientre, sintiendo otro ligero movimiento.

-¡Waa! ¡Se movió!-

-Sí es que ya sabe que eres su tío el demente….-

-¡Cállate Minho!-

Esa noche fue otra de las que no durmieron, así que cuando amaneciera tendrían que disculparse de nuevo con los vecinos, quienes primero los reñirían y después los felicitarían. Y junsu entonces le dedico una última mirada a su hermano menor indicándole con ello que todo estaba bien que no se preocupara.

**********

Nueva York, Hotel Waldorf-Astoria.

Soltó un suspiro inaudible recargado sobre el barandal del balcón de ese Penthouse, mirando el brillante y a la vez ruidoso paisaje que le ofrecía la ciudad de Nueva York, sus hermanos lo habían obligado a estar ahí para presenciar el primer desfile de modas al que habían accedido a financiar precisamente por él, mencionando que era mejor que comenzara a distraerse porque ya los tenía hartos con esa expresión desolada y melancólica, últimamente Changmin accedía a salir a los lugares que el frecuentaba aunque le incomodara en demasía el ambiente alegando que prefería eso a verlo suspirar y divagar como alma en pena por la empresa y por su departamento incluso su padre había hablado con él preocupado por el decaimiento en du actitud.

-Son 6 meses…-murmuro al viento, tal vez si estaba obsesionado, era para que ya lo hubiera superado y lo recordara como el mejor acoston de su vida, pero era ese precisamente el problema no fue solo un acostón, incluso había estado saliendo con chicas en las que encontraba aunque sea una pequeña similitud de Junsu, al final todo resultaba más estresante y agotador, porque ellas no eran él.

El sonido del teléfono lo saco de su auto impuesto estado aletargado y se apresuro a contestar, de seguro eran los idiotas de sus hermanos que lo atiborrarían de más trabajo para distraerlo lo suficiente y así obligarlo a dormir…

**********

Casi séptimo mes de embarazo Junsu salía del ascensor del hospital asistido por sus hermanos con las imágenes de ese tercer ultrasonido bien guardadas en un folder.
No había podido evitar ponerse a llorar cuando lo vio moverse y chuparse el dedo a pesar de no ser la primera vez, sin mencionar que tuvo que aguantar los regaños del doctor porque últimamente los pies se le hinchaban y de repente le daban las denominadas contracciones de Braxton Hicks, lo obligaron a aprenderse el nombre, y en una de esas termino de rodillas en las escaleras de la universidad, que no fue nada grave pero le han hecho un drama, Eunhyuk casi llora y sus hermanos casi lo estrangulan, pero después de todo su embarazo iba de las mil maravillas estaba bastante abultado y le gustaba que su pancita fuera tan redonda.

-Vamos a comprar algo de comer ¿no?-

-Mejor vamos a ver las cómodas y las cunas para los bebes recuerden que eso es lo único que nos hace falta y además tengo un compromiso con Donghae hyung-murmuro Minho viendo la hora cada tanto en su celular.

-Querrás decir que tienes una cita con el pescado…-lo codeo Junsu, mientras su hermano entornaba los ojos fastidiado.

-Ya te dije que es solo un amigo, si no fuera así crees que Jaejoong me dejaría hablarle…-le dijo lo último en un susurro.

- Creo que tienes razón min-

-Hey ya dejen de hablar a mis espaldas, además si hubiera conocido a Donghae unos meses antes no lo hubiera dejado acercársele a mi hermanito adorado, pero ahora que Minho la está haciendo de celestina con el tal Kibum estoy más tranquilo-dijo riendo mirando las tiendas de ropa pues llegaron a la zona comercial.

-¿Qué les parece si vamos a comer algo, luego vamos a una mueblería y al final vamos a comprar ropa?-

-Jaejoongie desde que tienes ese nuevo trabajo estás demasiado animado ya nos dices ¿por qué?-ese fue Junsu pues Minho estaba bastante entretenido mensajeandose de nuevo con Donghae.

-Porque adoro a mi nueva jefa es accesible, amable y le gusta mi trabajo, no como los brutos cerdos que usualmente me habían contratado-molesto entro al primer Restaurante que se le hizo cómodo.

-Ah, gracias por la información, por cierto he pedido la licencia de maternidad para 15 días antes del parto y los profesores no han objetado nada ¿Tu qué dices, está bien?-

-Sí no veo ningún inconveniente después de todo es bueno que nos esté yendo de maravilla junsu ¡¡ya quiero que nazca!!-

-Sí yo también, sin mencionar que mi ratoncito se retuerce como lombriz y no me deja dormir-

-Buenas tardes ¿Qué se les ofrece?-interrumpió un camarero de expresión amable dirigiéndose específicamente a Junsu.

-Me traería por favor una ensalada, un vaso con agua mineral y un filete-ordeno Jaejoong mientras Junsu releía el Menú incomodándose por la mirada que le era dirigida.

-Yo quiero lasaña y una coca fría-dijo Minho riéndose solo con el teléfono en las manos.

-Yo quiero lo mismo-dijo junsu casi aventándole el menú en la cara al tipo para que dejara de incomodarlo.

-En un momento con permiso-hico una venia y se retiro, mientras jaejoong se reía del puchero en la cara de Junsu.

-Parece que no le importaría mucho ser el appa de tu ratoncito-

-¡Así! pues que ni se haga ilusiones yo ya tengo un señor ratón que es el appa de mi bebe-dijo molesto haciendo reír de nuevo a Jaejoong, mientras Minho seguía en su mundo viendo disimuladamente al mesero, vaya tipo.

Después de la comida Minho salió corriendo a encontrarse con Donghae; Jae y Su fueron a visitar algunas tiendas de muebles para bebe y al final optaron por comprarle más ropa al bebe toda en colores neutros porque Junsu se negó rotundamente a saber el sexo del bebe desde el principio, después de caminar por casi todo el Centro Comercial con un eufórico Jaejoong decidieron tomar un taxi para llegar a su casa.

-Bájate con cuidado Junsu, yo llevo las bolsas-

-Ya entendí Jae no tengo 5 años-

-Si no lo decía por ti recuerda que llevas dentro a mi sobrino…-

-Eres malo-

-Sip, muchas Gracias-dijo pagándole al taxista bajándose presuroso.
Se precipitaron hacia las puertas de su edificio y abordaron con rapidez el elevador, jaejoong no necesito preguntar para saber que Junsu se estaba haciendo del baño, así que cuando se abrieron las puertas en su piso lo vio correr despavorido abriendo la puerta de su casa y adentrándose corriendo.

-¡AHHHHHHH!- y ese grito alerto a Jaejoong quien entro corriendo a su casa solo para ver en medio de la sala una enorme cuna en forma de Delfín con un gigantesco oso de peluche sobre ella.

-¡¿Qué demonios…!?-

-¡¡¡SORPRESA!!!-Gritaron de repente espantándolo y botando las bolsas de ropa sin cuidado, viendo salir de detrás de la cuna a Hyuk, Sungmin, Minho y Donghae.
-Es un regalo…-hablo minho sonriente.

-Pero…¿como…si….-

-No te preocupes por el dinero Junsu, recuerda que hemos estado cobrando cuotas-rió burlonamente EunHyuk.

-Eso es cierto Junsu-ah ¿A caso pensabas qué se iba a quedar con el dinero?-pregunto Sungmin quien ya no era rosadito.

-La verdad…sí- respondió con sinceridad sacando risas generales.

-Pero aún así con lo que pudieron juntar no les alcanzaba para una cuna de esas características.-se acerco Jaejoong.

- lo que hizo falta lo pusimos entre todos Minho es bastante más terco que Junsu y no dejo que la pagáramos nosotros, sin importar cuánto es que insistió Donghae y al final también decidimos comprar un oso-Explico Hyuk mientras Minho se reía avergonzado aún lado de Dongy.

-¿Acaso se conocen?-pregunto Jae señalando a Donghae.

-Sí, es el pretendiente de mi primo Kibum-Acoto Sungmin sonriendo.

-Oh…-

-¡Muchas Gracias en verdad que son los mejores!-se hizo notar el panzoncito de nuevo, acercándose a revisar la cuna mientras no se quedaba con las ganas de abrazar al osote.

-Supongo que hoy habrá fiesta ¿no chicos?-

-Parece jaejoong shii lamento importunar así-se disculpo Donghae.

-No hay problema, Minho vayan a comprar unos refrescos yo preparare algo para cenar, háganlo antes de que junsu se ponga a llorar-

-¡¡Jae eres cruel!!-

-Si como tú no lidias con sus ataques de melancolía-

-Ok tienes razón, vamos hyung…-

-¿Te gusta Junsu?-

-Sí…Esta muy… muy linda Hyuk…-

-Agradécelo a Sung-ah y a Minho, Donghae y yo queríamos un dinosaurio-refunfuño cruzándose de brazos.

-¡¡Por dios ardilla!! Será un bebe no un niño hiperactivo de 10 años-le dijo junsu riéndose de forma peculiar.

-Sabes me alegra que estés tan animado, sé que no hace falta decirlo pero siempre puedes contar con nosotros ¿entiendes?-

-¡SI! ¡Pero te estás haciendo viejo y cursi!-Grito comenzando a correr por el departamento con su amigo detrás de él, esa noche fue cálida y reconfortarte, a pesar de no tener a sus padres con ellos, Junsu les agradecía infinitamente el poner a gente tan buena y que los quisiera tanto en su camino, porque ahora también tendrían que cuidar de su futuro nieto o nieta…

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El día no iba bien y lo supo desde el momento en que abrió los ojos, sencillamente no se sentía de ánimo para ir a la empresa, mucho menos con sus hermanos encima de él todo el tiempo, quería estar solo y perderse y también dejar de sentir esa extraña preocupación ajena a su espíritu que lo invadía por instantes, como si fuera un presentimiento de algo o sobre alguien.

Camino sin rumbo fijo por la inmensidad de ese parque observando con alegría a las familias pasear sonrientes, sin aparentes preocupaciones, instalándose en su ser el repentino pensamiento y la necesidad de prometerse así mismo que sí algún día decidía tener una familia, sus hijos serían los niños más felices del mundo y siempre estaría ahí para ellos, siguió su camino sin dejar de sonreír, después de conocer a Junsu la idea de formar una familia no le parecía tan descabellada, una fuerte ventisca azoto de repente dejándole en el cuerpo un ansia extraña que decidió ignorar por segunda ocasión en el día encaminándose a paso lento hacia esa cafetería de la esquina que era cómoda y lo llenaba de paz.

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Estaba en casa descansando, después de todo en la universidad le habían otorgado la licencia de maternidad y Jaejoong le había ordenado explícitamente quedarse quieto y sin hacer nada más que mirar televisión o algo que no supusiera un gran esfuerzo físico para él, y era totalmente irreverente que estuviera sobre un banco buscando en lo alto de su armario esos documentos que estaba seguro había visto en ese lugar; y como una horrible jugarreta del destino el banco comenzó a menearse por los bruscos movimientos que junsu realizaba para poder alcanzar esa caja que había estado buscando, tomándola, solo para instantes después sentir el duro golpe contra su espalda y trasero al caerse del banco desperdigando los papeles por la habitación generando un ruido escandaloso, que hubiera generado la rápida atención de alguien, si no fuera el único en casa…

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Había decidido sentarse en esa mesa apartada ordenando un vaso con leche y galletas, pedido que resulto peculiarmente infantil para la mesera quien se acercaba a él con una sonrisa para entregarle lo que pidió, depositando con cuidado ese plato con galletas sonriéndole después para tomar el vaso con leche que resbalo de su mano cuando un repentino roce con Yoochun le genero una pequeña descarga.

-¡Lo siento mucho señor!-comenzó a disculparse la señorita, mientras Yoochun comenzaba a preguntarse qué diablos estaba pasando, pues al estrellarse el vaso sintió como si una parte de sus entrañas hubiera sido estrujada con fuerza.

-No se preocupe, fue solo un accidente…-

-¡Disculpe! ¡Ahora mismo le traigo otro vaso con leche!-le dijo haciendo una venia retirándose apresurada después de levantar los cristales del suelo; y él…él prefirió quedarse ahí sentado con la mirada perdida intentando descubrir que es lo que estaba mal.

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Una llamada, gritos y dolorosos sollozos, Jaejoong saliendo aterrado de su trabajo sin importarle que lo hayan amenazado con despedirlo, importándole poco el haberse cortado la mano 2 horas antes de que Minho lo llamara por teléfono llorando y en estado de Shock diciéndole que estaban en el hospital, que cuando llego a casa encontró a junsu inconsciente en el piso de su habitación con los documentos que a veces estudiaba papá desperdigados por el suelo, rogándole que se apurara, que no quería estar solo, aunque Donghae hyung hubiera estado con él, que Eunhyk y Sungmin iban en camino y que los médicos aún no le decían como se encontraba Junsu...

Llorando siguió corriendo aunque la visión le fallara, aunque se tropezara y le ardiera el pecho a falta de aire porque no estaba dispuesto a perder a su hermano ni a su sobrino, no ahora, no ahora que todo estaba bien para ellos…

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Después del incidente en la cafetería regreso de nuevo a su apartamento, encerrándose a cal y canto lanzando por algún lugar ese maldito celular que no había dejado de sonar en ningún momento que marcaba incontables llamadas perdidas de sus hermanos, con quienes se había llevado mejor los últimos 7 meses que en toda su vida, encendió la radio y se quito la gabardina quedándose un buen rato observando esos vasos, sus…luces de colores…

Antes de tomarlos y arrojarlos con dolorosa frustración contra el piso como lo hizo con todo lo que se puso enfrente de él, intentando así menguar el doloroso desasosiego que crecía a cada instante un poco más en su pecho terminando abrazando sus rodillas llorando desconsolado en un rincón de la cocina con varias latas de cerveza y vinos a su alrededor…

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Cuando al fin llego al hospital corrió a abrazar a Minho dejándose caer al piso desconsolados, los doctores decían que el golpe no fue grave pero que había inducido el parto y que tal vez generara complicaciones que ponían en riesgo la vida de Junsu.

Jaejoong enfureció, grito, lloró y rogo para que les salvaran la vida a ambos antes de que lo sedaran y todo se volviera oscuridad a su alrededor.

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Changmin y Yunho estaban preocupados, habían intentado localizar a Yoochun todo el día no les contestaba el teléfono y nadie sabía dónde estaba, corrieron de un lado para el otro buscándolo casi hasta que oscureció sin dar con el o con un indicio de su paradero, derrotados decidieron correr entonces hacia el departamento de su hermano no podía estar en ninguna otra parte.

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Cuando se canso de llorar salió tambaleante hacia el balcón de su apartamento, el aire le despejo la mente y le activo los sentidos siendo consciente de nuevo de todo a su alrededor y de la música que no había dejado de sonar ni un instante, prestándole atención a la letra de esa canción sentado en el borde del barandal…

Ella me entrego su cuerpo
En una noche cualquiera
Luego abandono mi puerto
Como un barco de vela.

Eso era cierto…
Dos hombres bajando de sus autos preocupados corriendo hacia las puertas de ese lujoso edificio…

Ella me detuvo el alma
Un reloj sin manecillas
De repente estaba solo
Cuando amanecía.

Las puertas del ascensor abriéndose y ellos ingresando presionando desesperadamente el número 16…

Todo se cambio esa noche
Hasta el color de las estrellas

Todo fue tan diferente

Por ella.

Yoochun sonrió-Es un él…pero igual aplica…-acoto riéndose como un tonto de su propia broma comenzando a sentirse adormilado…

Porque te fuiste
Y no dejaste huellas
Me vuelvo triste
No mezclo tu silueta
Es que la noche es tierna.

Finalmente habían llegado y respiraron con un poco más de normalidad cuando escucharon la música proveniente del apartamento de su hermano comenzando a tocar aún desesperados…

Busco y se desaparece
Amor que se va no y vuelve
Pero que me sube al alma
Como un fuego que crece.

Nada ejemplificaba mejor como se había sentido los últimos meses sonriendo torpemente sintiendo pesadas las extremidades de su cuerpo ignorando los insistentes llamados que hacían a la puerta…

Solo te has ido soñando
Procurando que a parezca
Ese amor que hace falta
Ese amor que me alimenta.

Una persona aferrándose a la vida por otra en el quirófano de un hospital, sintiendo también la asfixiante angustia de alguien más…

Porque te fuiste
Y no dejaste huellas
Me vuelvo triste
No encuentro tu silueta
Es un sueño del que no quiero escapar
Y es que tu imagen no se puede revelar.

La puerta siendo abierta con una feroz patada ingresando al departamento ignorando el desorden y el licor, viendo aterrados la figura de su hermano tambalearse sobre el barandal de ese balcón abalanzándose con asfixiante angustia hacia el desconectando esa radio en el proceso, sumiendo todo en un plácido silencio cuando lo sujetaron de las ropas calleándose sobre el frío suelo de concreto con él entre sus brazos, tan débil e inseguro, no pudiendo contenerse más llorando como cuando eran niños asustados e inseguros sin saber cómo enfrentarse a la vida al día siguiente…

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El llanto de un bebe rompiendo el silencio que se había formado en esa habitación los médicos sonriendo estabilizando al paciente mientras el bebe era limpiado, preguntándose como es que podía estar consciente y sonriendo mirando de soslayo a su hijo a quien solo le acarició una pequeña y suave manita antes de caer desmayado….

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Familiares y amigos volviendo a respirar no pudiendo ocultar la felicidad y alegría que les inundaba el cuerpo y el alma…

-Fue un niño… fuerte y sano…-


Continuara…

La letra es de la canción Por ella de Luis Fonsi =)