El One Shot que no tiene Nombre XD

EL ONESHOT QUE NO TIENE NOMBRE

(Asdsadasdsdsdsd! Pensé en todo menos en el nombre XD)

Autor: Fabi 08

Pareja: Changminho

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Las clases estaban a punto de culminar. Era viernes a última hora y la multitud de alumnos, como era costumbre, alborotaban el lugar.

Junto a la puerta, solo y sin hacer un mínimo esfuerzo por socializar, se encontraba Minho, dibujando figuras raras en su cuaderno. Soltó un suspiro y volteó su cabeza hacia donde se encontraba él.

En la otra esquina, donde todos conversaban, estaba Changmin. Riéndose a carcajadas. Sí. Su risa era contagiante y fresca.

Una chica se paró a su lado, acariciando uno de sus brazos.

“Oppa, eres muy fuerte”.

Estúpida.

Changmin era muy apuesto y eso hacía que las mujeres se le insinuaran descaradamente. Suerte que no había aceptado a ninguna.

Pero… ¿qué le permitía pensar que tal vez él lo acepte?

Sin querer se encontró con su mirada, por un instante se observaron, lo cual bastó para que Minho se sonrojara furiosamente y escondiera su rostro entre sus brazos. Estuvo así unos cuantos minutos hasta que una persona tocó su cabeza.

Levantó su rostro lentamente y se llevó una sorpresa cuando vio a Changmin arrodillado frente a él. Le sonrió ligeramente y acercó su rostro.

Minho volvió a sonrojarse.

- Minho… ¿por qué siempre que me miras te sonrojas?- Sintió como el fresco aliento que chocaba con su rostro y dejó de respirar. Miró al castaño, quien lo miraba expectante mientras esperaba su respuesta.

Era un buen momento para desaparecer de la tierra. Apostaba todo a que ya se había dado cuenta de sus sentimientos hacia él.

El más alto se paró y tomó su mano, lo cual hizo que sintiera deliciosas descargas eléctricas en todo su cuerpo.

¡Diablos!

Se estaba comportando como un idiota aunque no pudiera hacer nada para evitarlo.

- Vamos

Lo paró para que se levantara.

- ¿A- a dónde?

- Ya verás- entrelazó sus manos, hizo que se parara y sin que nadie se diera cuenta salieron del salón.

Minho se dejó guiar por los pasillos. Estaba medio inconsciente, sintiéndose flotar en una burbuja. Simplemente no podía creer que Changmin lo tratara de esa forma.

De pronto se encontró acorralado en una de las paredes del baño con Changmin muy cerca suyo, el castaño se iba acercando lentamente a su rostro.

- ¿Qué… qué haces?- su corazón latía cada vez más rápido.

Sintió como unos labios ajenos hacían presión sobre los suyos, aturdiéndolo y quitándole el aire. Simplemente dejó que Changmin le robara su primer beso pero no le importó ya que de todas maneras ya le pertenecía.

- ¿Yo… te gusto?

Tardó unos segundos en asimilar la pregunta, luego su rostro pasó del blanco al rojo y viceversa. Definitivamente hubiera esperado todo menos esa pregunta. Pero pensó que tal vez era su oportunidad, nunca se volvería a repetir. Porque ya no le importaba si es que no era correspondido, aunque esperaba lo contrario… en eso beso se había sentido amado.

- Yo …- suspiró- sí, sí me gustas Changmin, me gustas mucho pero …

Changmin lo calló nuevamente con un beso, pero ahora apasionado, fogoso, demandante y asfixiante. Posó su mano por debajo de la camiseta del menor acariciando su deliciosa y tersa piel, pero aquello no satisfacía sus ansias, intentó llevar la misma hacia el miembro del que yacía acorralado por su cuerpo. Sin embargo, éste puso resistencia.

¿Qué le pasaba?

-¡No! Suéltame…- intentó empujar a Changmin con toda su fuerza, aunque sin causar mucho efecto – Yo no quiero esto.

- Pero, ¿no acabas de decir lo que sientes por mí? Es obvio que quieres esto.

- ¡Cállate! Yo… yo no lo quiero así, es más… pensé que eras diferente.

Abandonó el lugar dedicándole una mirada dolida aguantándose las ganas de llorar por indignación y tristeza. ¿Por qué le iba mal en el amor?

Caminó hacia el patio trasero de su escuela, rozando las flores púrpuras con las yemas de los dedos. En medio de aquel gran espacio se hallaba un lugar al que siempre solía ir. El respaldar de un viejo y enorme roble con el tronco tan macizo como una roca Se recostó en él y fue sintiendo poco a poco la fresca ventisca que acariciaba su piel y revolvía sus sedosos cabellos.

Su mente no pudo evitar recordar los sucedido con Changmin, sus deliciosos labios sobre los propios fundiéndose en ese beso. Sus manos acariciándolo… ¡Ah! Aunque le haya gustado debía dejar de pensar en ello, pero lamentablemente no era una tarea fácil.

Una semana, una semana en la cual había evitado a toda costa toparse con el mayor. Era un alivio que solo compartieran una clase.

Lanzó un suspiro, ahora tenía que concentrarse en estudiar porque pronto tendría exámenes. Sacó de su mochila un libro pesado y se puso a leer. No contaba que como estaba tan cansado cayó rendido si haber terminado la primera hoja.

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Se agachó hasta quedar a su altura, se detuvo y observó detenidamente ese bello rostro. Su cabello negro azabache que le caía en la frente lo hacía ver tan inocente y puro. Suspiró. Simplemente no supo lo que le pasó en esos momentos. Tal vez, el que desde mucho tiempo hubiera esperado que Minho le confirmara sus sospechas.

- Changmin…

¿En qué momento se había despertado?

- Minho – lo jaló de la mano pues el menor hizo el amago de levantarse.

-No te vayas, por favor. Solo escúchame un momento- afianzó el agarre de sus manos e intentó mirar su rostro pero éste no se lo permitió.

Minho vaciló unos cuantos segundos, lanzó un suspiro, volteó el rostro y separó sus manos.

- Si vas a disculparte, no lo hagas si verdaderamente no lo sientes.

- No, yo… bueno. Sí.- lo miró directamente a los ojos.

- Perdóname… por favor, por favor. Sé que te ofendí y te asusté. Juro que esa no era mi intención. Solo… solo me dejé llevar por mis sentimientos. Yo te amo, te amo desde la primera vez que te vi. Me enamoré de tu inocencia y me quise aprovechar. Minho, perdóname …

El pelinegro no podía estar más sonrojado y sorprendido, era la primera vez que alguien le decía cosas así y todavía no las asimilaba. Se sintió muy dolido cuando el mayor lo trató como a cualquier amante y no apreció su amor.

Aún no sabía que responderle, un lado le decía que tenía que hacerse respetar y el otro, que se deje llevar por el amor y la pasión. Su cabeza era lío completo.

-¡Ahhhhhhhhh!- se dejó caer sobre la verde hierba del parque.

-¡Minho! ¿Estás bien?- quedó encima de él con la expresión llena de preocupación y angustia. Apostaba que lo había matado pues el menor tenía los ojos cerrados.

-Eres un desgraciado… - esbozó un pequeña sonrisa aún con los ojos cerrados.

- ¿Qué?

- Te odio- Minho posó su mano sobre la nuca de Changmin, jalándolo hacia él y haciendo que sus labios se fundieran en un inevitable beso, recorriendo las cavidades del otro y deleitándose con los exquisitos sabores.

- Tus palabras me lastimaron, mucho, pero no puedo dejar de quererte…

- Entiendo- Changmin sujeto el rostro de Minho con sus dos manos- Solo dame una oportunidad. No te defraudaré- dejó un casto besito en la nariz del menor.

- ¿Sí?

El pelinegro entrecerró los ojos, lanzó un suspiro y le sonrió con una sonrisa tierna y enamorada. Le dijo que sí asintiendo la cabeza, quería correr el riesgo, quería sentirse lleno de amor, quería amar, quería ser feliz junto a Changmin.

El castaño no podía estar más feliz, así que solo atinó a encerrar en sus brazos a ese frágil Minho y perderse en el delirante perfume que emanaba su largo cuello.

- Te amo.

Fin (¿?)

AHAHAHAHAHAHA *------------------------------* ES PURO AMORRRR XD

Fue mi regalito de cumple pero asdghdfd lo perdi 3 veces .__________________. así que por eso no habia podido compartirlo tsk, Muchas gracias Fabi me encanto y asdghdjf >//< hermanita te quiero mucho :3

Ando transcribiendo pero tengo un monton de tarea asi que por eso me tardo xD la proxima semana espero tener otro cap listo ^^

Muchas gracias por andar por aqui y no sean malos comenten X_X XD

Sale me voy, portense mal pero cuidense bien ne >.O!!